CIUDAD DE MÉXICO,- Se han limado las asperezas y el punto de vista coincide: aprobar el uso de marihuana con fines medicinales y científicos. El Senado avanza y se halla en la línea correcta para «darle su bendición» luego del impasse provocado merced a errores en la redacción del dictámen que dejaban fuera de la regulación al tetrahidrocannabinol.
El cáñamo, que es el nombre que reciben las variedades de la planta Cannabis sativa, tiene usos textiles e industriales y de él obtiene la sustancia THC, que se utiliza para la fabricación de medicamentos que funcionan aliviando el dolor en diversos padecimientos como cáncer, epilepsia y esclerosis.
Los senadores avanzan en una alternativa para que medicamentos como los que consume la niña “Grace” Elizalde Benavides para controlar su epilepsia refractaria, elaborados a base de cáñamo, no se regulen por contener una concentración menor a uno por ciento de la sustancia conocida como Tetrahidrocannabinol o THC.
El presidente de la Comisión de Salud, Salvador López Brito, comentó en entrevista que luego de estudiar varias alternativas, se encontró una que podría desatorar la discusión y permitir la aprobación de la iniciativa que regula el uso medicinal y científico del cannabis.
“Ya llegamos a unos acuerdos de avance. Definitivamente lo que vamos es el tema estrictamente médico, terapéutico-científico” y se espera el respaldo de todos los grupos legislativos para su aprobación ante el pleno en la sesión de este viernes, dijo el senador panista.
“Se está haciendo una diferenciación, colocando en la tabla 2 de la posición de cómo se regulan los medicamentos, a todos los contenidos de THC que tengan por arriba de uno por ciento y en la tabla 4, donde se consideran medicamentos inocuos para la salud, a los derivados que tienen un porcentaje menor a 0.99 por ciento donde están los productos del cáñamo”, explicó.
“Con esto estamos dando una salida más flexible, para la adquisición de este tipo de productos”, abundó el legislador del Partido Acción Nacional (PAN).
En caso de aprobarse esta propuesta, medicamentos elaborados con cáñamo en concentraciones menores a 0.99 por ciento, podrán no solo importarse, sino también fabricarse en México, con lo que se bajarían sus costos en el país.
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