ESTAMBUL, TURQUÍA.- Un vocero del Gobierno de Turquía, dio a conocer que los tres sospechosos de haber perpetrado esta semana los ataques con armas y bombas que dejaron 43 muertos en el principal aeropuerto de Estambul eran de Rusia, Uzbekistán y Kirguistán y pertenecerían al grupo insurgente Estado Islámico.
El atentado en uno de los aeropuertos más concurridos del mundo, que es un importante centro de tránsito entre Europa y Asia, fue el más mortífero de una serie de ataques suicidas que han ocurrido este año en Turquía.
Los tres hombres abrieron fuego para crear pánico en las afueras del aeropuerto, antes de que dos de ellos se consiguieran en el interior del edificio del terminal y se inmolaran con explosivos. El tercero detonó sus bombas en la entrada. Más de 239 personas resultaron heridas.
El funcionario no dio detalles más allá de confirmar las nacionalidades de los atacantes y pidió no ser identificado bajo el argumento de que la investigación aún está en proceso.
El ministro del Interior turco, Efkan Ala, dijo al Parlamento que la evidencia continuaba señalando a Estado Islámico como responsable y que el número de muertos había aumentado a 43, de los cuales 19 eran extranjeros. Aagregó que la identidad y la nacionalidad de uno de los atacantes habían sido determinada, pero no hizo más comentarios.
El periódico pro-gubernamental Yeni Safak dijo que el atacante ruso era de Daguestán, que limita con Chechenia, donde Moscú ha liderado dos guerras contra los separatistas y militantes religiosos desde que la Unión Soviética colapsó en 1991.
El diario turco Hurriyet lo nombró como Osman Vadinov y dijo que era procedente de Raqqa, el corazón del territorio controlado por Estado Islámico en Siria. El Ministerio del Interior de Rusia dijo que estaba verificando la información sobre Vadinov.
Un portavoz del servicio de seguridad estatal de Kirguistán dijo que estaban investigando, mientras que los organismos de Uzbekistán no emitieron comentarios inmediatos.
Miles de combatientes extranjeros de decenas de países han cruzado Turquía para unirse a Estado Islámico en Siria e Irak en los últimos años. Turquía ha reforzado la seguridad en su frontera con Siria, pero ha dicho constantemente que necesita más información de las agencias de inteligencia extranjeras para interceptar a los insurgentes.
La revelación de que uno de los atacantes era de nacionalidad rusa ocurre en un momento delicado para las relaciones entre Ankara y Moscú, que están tensas desde que Turquía derribó un avión de combate ruso cerca de la frontera con Siria en noviembre pasado.
El presidente de Turquía, Tayyip Erdogan, escribió al líder ruso, Vladimir Putin, esta semana para expresar su pesar por el incidente, pero funcionarios en Ankara dijeron que estuvo a punto de frenar la disculpa a la espera de que levante las sanciones económicas.
La policía turca detuvo a 13 personas, cuatro de ellas extranjeras, en redadas en Estambul vinculadas con el atentado de la noche del martes. El canal de televisión CNN Turquía reportó que fueron acusados de dar apoyo logístico a los atacantes.
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