ESTADOS UNIDOS.- Tras las elecciones de hoy en Estados Unidos, a los mexicanos en ese país les esperan a partir de este miércoles tiempos difíciles porque «algo se rompió» y el ambiente tóxico afectará a un amplio sector social, que incluye sobre todo a la población latina.

Una amplia masa de partidarios del republicano Donald Trump se encargará de hacer «la vida imposible» a quienes considera «diferentes» e «intrusos», sean mexicanos, chinos o árabes, afirmaron especialistas.

«Vamos a tener a 50 millones de blancos, clasemedieros, sin educación universitaria profundamente enojados y resentidos» o bien envalentonados pero difícilmente el ambiente será distinto al que imperó en la parte más álgida de las campañas, señaló el analista Gabriel Guerra.

«Los racistas que ya salieron del closet no se volverán a ocultar, el hostigamiento contra las minorías va a aumentar a nivel social, se va a poner peor» independiente de quien esté en la Casa Blanca, afirmó.

«Lo que esta campaña electoral nos ha demostrado es que el ‘americano feo’ (The american ugly), como la película de 1963 que se llamaba así, sí existe, no es un mito, ni un resabio del siglo pasado», señaló Guerra recordando la famosa cinta protagonizada por Marlon Brando.

«Está ahí, hostiga, sale vota, vocifera, agrede, ya salieron del closet, ya se descararon, lo que me hace temer es que viene una etapa muy fea para Estados Unidos», afirmó. El investigador Alberto Azi estimó que «la coalición del odio, la estupidez y las fronteras cerradas es una amenaza para el futuro» y señaló que después de la aparición de Trump las «divisiones se han profundizado para mostrar posibles fracturas» que afectarán a los mexicanos en Estados Unidos.

«Esta campaña ha sido una larga exhibición» que revela que «la democracia norteamericana está enferma», dijo el escritor Jesús Silva, quien señaló que «lo más temible es el surgimiento de una opción fascista, una alternativa abiertamente autoritaria que amenaza con limitar las libertades» de todos los ciudadanos, incluidos los mexicanos.

Ante la secuela que dejará una campaña electoral muy confrontada donde los mexicanos se colocaron en el centro del debate, la gran pregunta que surge entre los entendidos es cómo se reconstruirán las relaciones entre México y Estados Unidos, y qué se hará para proteger a los ciudadanos de este país ante este «ambiente envenenado».

Para restañar los vínculos entre ambos países, Roy Campos, experto en encuestas, señaló que «no va a ser fácil: va a ser necesario mandar mensajes, ofrecer aperturas, y realizar intenso trabajo diplomático».
Guerra estimó que «hay una animadversión» en Estados Unidos contra el gobierno mexicano que no data desde la aparición del conservador Donald Trump en el escenario sino desde antes.

«Hay qué empezar a trabajar desde abajo con el nuevo presidente, en el ámbito diplomático. Va a requerirse mucho trabajo de escritorio, de reuniones» bilaterales, indicó.

Roy Campos señaló que Estados Unidos también va a querer entrometerse en la elección presidencial mexicana de 2018, así como México lo hizo con la de Estados Unidos.

En días pasados, un grupo de senadores mexicanos se colocó una playera con la leyenda «Hillary Clinton para presidenta».

«Si pasara algo así en México, sería impensable», recordó Campos, que es director de la firma encuestadora Consulta Mitofski.

El Gobierno de Enrique Peña Nieto ha señalado que tiene un plan para la etapa postelectoral en Estados Unidos destinado a proteger los intereses de sus ciudadanos y del país, sobre todo porque se espera que surjan nuevas reglas en las relaciones bilaterales hasta ahora imperantes.

Entre esas nuevas normas figura la del comercio libre, pues es un hecho que el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLCAN), vigente desde 1994 y firmado también por Canadá, será renegociado, independientemente de quien herede el puesto que dejará vacante en enero próximo el presidente Barack Obama.

con información de agencias

jcrh