DENVER, ESTADOS UNIDOS.- Los vuelos supersónicos podrían dejar de ser cosa del pasado, gracias a Boom Technology, una startup la cual dio a conocer sus planes de llevar a cabo la construcción de una aeronave de este tipo a más tardar en 2020.

El último aparato en lograr algo de esta naturaleza, fue el Concorde en 2003.

Ubicada en la ciudad de Denver, Boom Technology dio a conocer al XB-1 Supersonic Demonstrator, aparato al cual se ha apodado Baby Boom, con el que planea hacer resurgir los vuelos comerciales supersónicos.

Según planes de la empresa, se tiene proyectado el vuelo del primer prototipo en 2017. Por lo que corresponde a un aparato comercial, con capacidad de 44 asientos, la fecha para tenerlo listo se ha fijado en 2020. El Boom como también se conoce a este aparato, podría volar a una velocidad de dos mil 335 kilómetros por hora. Esto es un 10 por ciento más rápido que el legendario Concorde.

La aeronave será capaz de atravesar la distancia entre Londres y Nueva York —normalmente un vuelo de siete horas— en 3.5 horas, y entre Los Ángeles y Sidney —un viaje de 15 horas— en 6 horas y 45 minutos. El precio inicial por el momento ha sido fijado en cinco mil dólares para el vuelo de la capital británica a la megalópolis estadunidense.

El conglomerado multinacional Virgin Group, fundado por el magnate británico Richard Branson, proporcionará apoyo financiero y servicios de ingeniería a Boom Technology.

El grave accidente de uno de los Concorde el 25 de julio de 2000, el único en 27 años de servicio que costó la vida a 113 personas, y otros factores como la escasa rentabilidad, precipitaron su retiro definitivo. Su último vuelo fue el 26 de noviembre de 2003.

El Concorde fue el primer avión a reacción supersónico en ser usado de manera comercial, puesto en servicio el 21 de enero de 1976, anticipándose al también supersónico Tupolev Tu-144, la versión soviética del Concorde, que entró en servicio de pasajeros el 1 de noviembre de 1977.

jcrh