ESPAÑA.- Su nombre es Darío García, tiene 24 años y es biólogo de profesión. Su gran pasión es el estudio de la complejidad celular del cáncer. Por tal motivo, lidera un equipo multidisciplinar de siete personas cuyo objetivo es “aportar un granito de arena” en la batalla contra esta enfermedad.
Hace un año y medio, se dio a la tarea del desarrollo de una tecnología que permite el poder imprimir órganos humanos en 3D, a fin de emular operaciones quirúrgicas.
La recreación de órganos humanos permite un gran avance antes de emprender cualquier intervención quirúrgica, sobre todo las relacionadas con las patologías del cáncer. Con este modelo un cirujano puede emular los pasos de la operación que va a realizar, tanto de los procesos de extirpación como de sutura. Además, sirve como plataforma para el aprendizaje de los estudiantes de cirugía.
Darío, es graduado en Biología por la Universidad de Marcia, con un doctorado en Investigación Clínica aplicado en oncología por la universidad Ceu San Pablo. Gracias a sus esfuerzos académicos, pudo lograr el primer lugar en el Premio a la Idea Joven Más Brillante de 2015, dotado con 10 mil euros. Gracias a esta cantidad pudo arrancar su sueño.
Para poder desarrollar su idea, García ha creado la empresa Cella Medical Solutions, que ofrece sus servicios a hospitales públicos y privados de España. Y están negociando con centros sanitarios de Latinoamérica, y muy probablemente cierren un acuerdo con hospitales de Colombia, revela.
Por ahora, es la única empresa que ofrece estos servicios, ya que lo más cercano que había en el mercado son empresas que imprimen prótesis o réplicas de huesos.
Actualmente su grupo interdisciplinario se encuentra colaborando con el hospital Arrixaca y Quirón salud Torrevieja.
Para poder llevar a cabo sus modelos 3D, inicia recibiendo el diagnóstico del paciente, una resonancia o ecografía. A partir de ahí, genera los modelos tridimensionales de las estructuras anatómicas que requiere el cirujano. Se diseñan en modelos virtuales que se envían a los doctores. Más tarde se imprimen esos modelos. Este, es un procedimiento que permite imprimir con materiales que tienen la misma consistencia y textura que los órganos reales.
«Lo que hacemos es imprimir un órgano, como puede ser un hígado, a partir de la información que brinda el TAC (tomografía axial computarizada), con la misma consistencia que el real», detalla García, quien precisa que utilizan diversas gamas de plástico y gomas, con diversas consistencias de uretano, para imitar la textura.
La reproducción presenta gradientes de transparencia y coloración para identificar las partes del órgano, en donde el tumor siempre se presenta en un evidente negro. «Esto no es fabricar salchichas», dice García, que puntualiza que cada modelo es único, porque tiene que ser fiel a los síntomas del enfermo, y lleva entre tres y cuatro días de producción.
Por el momento, sus modelos están encaminados a casos de cirugía extrema, pues como él mismo dice, lo que se busca es que el beneficio sea efectivo.
jcrh