BRUSELAS, Bélgica.- La proliferación del discurso del odio y las noticias falsas en las redes sociales han llevado a un aumento de la presión para las compañías, mientras que los defensores de Internet han advertido de que medidas excesivas podrían poner en peligro la libertad de expresión.
No obstante esta última postura, el Parlamento Europeo, aprobó este martes una serie de medidas por medio de las cuales YouTube, de Google, y Vimeo tendrán que tomar las acciones pertinentes para proteger a los ciudadanos del odio y la incitación a la violencia que emana de algunos contenidos que son mostradas en sus respectivas plataformas.
Los miembros del comité cultural del Parlamento Europeo votaron una proposición de ley que afecta a todo, desde el 30 por ciento de las cuotas para trabajos europeos en webs de video en streaming como Netflix a los tiempos de publicidad en televisión para combatir el discurso del odio.
Los legisladores aprobaron una enmienda que definirá las plataformas de intercambio de videos como servicios o una «sección disociable de un servicio más amplio» que «juega un papel significativo en la oferta de programas y videos generados por usuarios al público en general, de cara a informar, entretener y educar», lo que podría incluir a redes sociales como Facebook y Twitter.
Aunque la proposición votada por el Parlamento Europeo habrá de abordarse y acordarse finalmente con los países miembros, la medida amplía el ámbito de la ley para incluir a firmas de redes sociales.
Los países miembros podrán pedir también a las plataformas de video bajo demanda que contribuyan económicamente a la producción de obras europeas en el país donde están establecidos y también en aquellos a cuya audiencia se dirijan. Las contribuciones estarán basadas en los ingresos que servicios como Netflix y Amazon Prime Video ganan en el país en cuestión.
jcrh