BRUSELAS, Bélgica.- El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, advirtió que las negociaciones del Brexit podrían convertirse en «imposibles» si las partes discuten demasiado, en relación a las acusaciones de injerencia manifestadas por la primera ministra británica Theresa May.
«Estas negociaciones son bastante difíciles como tales. Si empezamos a discutir antes de que empiecen, se convertirán en imposibles», declaró Tusk durante una rueda de prensa en Bruselas.
«La apuesta es muy alta para dejarnos desbordar por nuestras emociones, porque es la vida cotidiana y los intereses de millones de personas, a ambos lados de la Mancha, lo que está en juego», declaró.
«Tenemos que mantener el espíritu para tener éxito, necesitamos discreción, moderación, respeto mutuo y un máximo de buena voluntad», señaló Tusk, que preside la institución que reúne a los 28 jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea (UE).
El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, ya aseguró que «nadie quiere influir en la campaña electoral del Reino Unido», reaccionando así a las declaraciones de May en la víspera.
May alzó el tono el miércoles por la tarde y acusó a «algunos en Bruselas» que «no quieren el éxito de las negociaciones, ni que Reino Unido lo consiga», durante una rueda de prensa frente a su residencia en el número 10 de Downing Street.
«La Comisión Europea ha endurecido su postura en las negociaciones. Algunas amenazas han sido pronunciadas contra Reino Unido por los políticos y responsables europeos», añadió . Asimismo estimó que «todo estaba deliberadamente programado para influir en el resultado de las elecciones» legislativas programadas para el 8 de junio.
Estos enunciados se suceden después de una secuencia difícil para la dirigente británica, desencadenada por un artículo de un periódico alemán publicado el domingo.
El Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ) afirmó que el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Junker consideraba que May vivía en «otra galaxia», por sus exigencias en las negociaciones tras una cena en Londres el 26 de abril. La canciller Angela Merkel advirtió a Londres que no se haga «ilusiones» con los compromisos del divorcio.
Con información de AFP.