* Todos las odiamos, no sabemos qué hacer con ellas, algunos no las reciben para pagar, pero las «moneditas» son más importantes de lo que crees
En algún momento de la quincen siempre llegan a tus manos, pero nunca sabes en qué ocuparlas y terminas dejándolas.
Hablamos de las «moneditas» esas que siempre te dan de cambio a dónde quiera que vayas.
A pesar de los mitos urbanos que dicen que no sirven para nada, son más importantes de lo que crees.
Para empezar, el no usarlas provoca pérdidas a usuarios y al país, por los altos costos que tiene su fabricación.
Las monedas de 10, 20 y 50 centavos son las que más se fabrican, pues terminan en alcancías o de diezmo.
En 2014, acuñar 196 millones de monedas de 10 centavos, costó 74 millones 480 mil pesos; es decir 38 centavos c/u.
Y todo eso no se gastó para que tú las tengas de recuerdo en la alcancía.
En 2018 se han fabricado 24.1 millones de piezas de esa denominación, con un costo de 4 millones 579 mil pesos.
El costo individual fue de 19 centavos, casi el doble de su valor, de acuerdo con datos de Banxico.
El aumento en los costos de producción depende de factores como el precio de los metales y sueldos de trabajadores.
En mayo de 2016 había en circulación 11 millones 170 mil monedas de 10 centavos; es decir, 91 monedas por mexicano.
Foto: Archivo
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