DETROIT, ESTADOS UNIDOS.- General Motors, la segunda armadora de Estados Unidos, se verá obligada a despedir en enero de 2017, a aproximadamente a dos mil trabajadores de sus plantas de ensamblaje en Ohio y Michigan.
Esta acción, tiene que ver con la cambiante demanda de vehículos por camiones y camionetas deportivas. Otras acciones que tendrá que implementar, tienen que ver con la suspensión de terceros turnos en las plantas de Lordstown, Ohio, y en Lansing, Michigan, debido al cambio en el mercado, el cual está creciendo y no muestra señales de abatimiento.
El 16 de enero, 840 empleados serán liquidados de la planta Lansing Grand River, que ensambla el Chevrolet Camaro y los autos de lujo Cadillac ATS y CTS. Y a partir del 23 de enero, unos mil 250 trabajadores serán despedidos de la planta Lordstown, que fabrica el vehículo compacto Chevrolet Cruze.
Las ventas de los Cruze han caído casi 20 por ciento este año a pesar de que una nueva versión está en su segundo año de producción.
De los vehículos que se arman en Lansing, la venta de los ATS y los CTS han caído 17 por ciento cada uno este año, mientras que las ventas del Camaro han bajado 9 por ciento, de acuerdo con Autodata Corp.
La empresa desconoce cuándo podrían volver a ser recontratados los trabajadores, dijo el portavoz Tom Wickham.
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