CIUDAD DE MÉXICO,-  El final de 2016 acelera el proceso de inflación lo que de alguna forma es un problema preocupante para iniciar el 2017, en la primera quincena de diciembre el incremento fue del 3.48%, respecto al mismo periodo del 2015; como es natural esto puede trastocar las condiciones económicas de los hogares mexicanos.

La depreciación del 28.22 por ciento de la moneda mexicana frente al dólar, aunado a las amenazas de endurecimiento en política comercial del gobierno entrante en Estados Unidos.

De acuerdo a información revelada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la inflación en México alcanzó su nivel más alto en dos años en reacción al incremento de precios en servicios, mercancías, energéticos y tarifas de electricidad.

La inflación subyacente, el mejor parámetro para medir el impacto del incremento de precios en la economía al descartar productos de alta volatilidad, presentó un crecimiento de 0.47 por ciento quincenal y de 3.46 por ciento anual, con alzas mensuales en los precios de las mercancías del 0.36 por ciento y los de los servicios 0.56 por ciento.

Las cifras referidas por el INEGI se encuentran por arriba de 3.42 por ciento que esperaban analistas consultados en un sondeo de Reuters, y al 3,32 por ciento de la quincena anterior.

De acuerdo al analista de Banco Base, Gabriela Siller, la inflación en 2017 podría dispararse hasta rozar los cuatro puntos porcentuales, convirtiéndose en uno de los problemas más graves de la economía y planteando un difícil panorama para el consumidor.

En sus estimaciones, el Banco de México (Banxico) señala que en 2017 tanto la inflación general, como la subyacente, registren incrementos adicionales proyectando el incremento del INPC en 3 puntos al cierre del año.
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