DAMASCO.- Un coche bomba explotó hoy cerca de un grupo de combatientes kurdos en la localidad siria de Tel Abyad, cerca de la frontera con Turquía, causando al menos 10 muertos y nueve heridos, informaron activistas sirios.
La agencia de noticias Amaq, afín al grupo yihadista Estado Islámico (EI), precisó que un kamikaze detonó el carro bomba frente a una oficina administrativa de Tel Abyad, donde se reunían miembros de la milicia kurda de las Unidades de Protección Popular (YPG). Las YPG son una de las milicias más importantes de Siria, donde son vistas como respaldo de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), cuya campaña para recuperar la ciudad de Manbij es apoyada por la coalición internacional liderada por Estados Unidos. Los yihadistas del EI han llevado a cabo un mayor número de ataques con coche bomba en las áreas controladas por los kurdos desde que perdieron parte de su influencia en el noreste de Siria. Tel Abyad, al norte de Raqqa y junto a la frontera turca, está controlada por la milicia kurda y supone un punto clave en la línea de suministros del EI, cuyos dominios se han reducido y sólo ocupa el 30 por ciento de Siria, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El grupo extremista ha asesinado a por lo menos cuatro mil 287 personas en Siria desde que proclamó hace exactamente dos años su califato en los territorios bajo su control en Siria e Irak. Del total de fallecidos, unos dos mil 301 eran civiles, incluidos 85 menores de edad y 129 mujeres, que perdieron la vida por disparos de los yihadistas, así como decapitados, lapidados o lanzados desde lo alto de edificios. Los cargos de los que el EI acusó a sus víctimas son diversos, como apostasía, espionaje, brujería, colaborar con el régimen sirio, homosexualidad o blasfemar, entre otros. Asimismo, el EI asesinó a 325 milicianos de facciones rebeldes e islámicas, el Frente al Nusra (filial de Al Qaeda en Siria) y de las milicias kurdo sirias, capturados en enfrentamientos o en puestos de control de los extremistas. Además, los yihadistas mataron a mil 174 soldados del régimen sirio o de grupos leales al presidente Bashar al Assad, y mantienen secuestrados a unos seis mil civiles.
El EI proclamó el 29 de junio de 2014 un califato bajo su territorio controlado en Irak y Siria, donde en este último país se llegó a expandir en un año por nueve provincias sirias y conquistó el 50 por ciento del territorio, lo que equivale a 90 mil kilómetros cuadrados. Sin embargo, en los últimos meses los yihadistas han perdido terreno hasta ocupar sólo el 30 por ciento de su superficie, tras derrotas ante el Ejército sirio, que ha sido respaldado por los bombardeos sirios, y las ofensivas lanzadas por las FDS.
Notimex/JRGA