BRUSELAS ,-  Al cabo de seis meses de sufrir atentados, que cobraron la vida de 32 personas y dejaron otras 350 heridas, muchas de gravedad, Bélgica está «más segura», afirmó el ministro de Seguridad e Interior, Jan Jambon.  “No digo que se puede excluir (la posibilidad de que ocurra) un nuevo atentado, pero (el país) se ha vuelto más seguro”, afirmó en entrevista al diario flamenco Het Nieuwsblad.

“Gracias a los métodos de información e investigación particulares, tenemos más posibilidades para interceptar los mensajes de las redes terroristas”, ejemplificó.

El ministro señaló que el grupo terrorista Estado Islámico (EI), autor de los atentados de Bruselas, ha cambiado su modo de operación, lo que implica una adaptación similar de parte de los servicios de seguridad europeos. Después de los atentados en el aeropuerto internacional de Zaventem y en la estación de metro Maelbeek, el gobierno federal anunció un total de 30 nuevas medidas para reforzar el combate al terrorismo.

La mayoría de ellas han sido ya implementadas, como las patrullas militares en las calles y en las plantas nucleares, la facilitación de las escuchas telefónicas y el aumento del efectivo dedicado a identificar discursos yihadistas en Internet.

Jambon manifestó que la tragedia de marzo contribuyó también para “reforzar la cohesión de la sociedad” belga.

“Las personas tienen que vivir sin miedo. Y lo hemos logrado hasta el presente”, estimó, señalando que los festivales de música habituales del verano belga se han mantenido, aunque bajo seguridad reforzada, y el público estuvo presente.

Las mejoras se notan también en el sector de la salud, de acuerdo con Olivier Vermylen, responsable del servicio de urgencias del hospital Brugmann y coordinador de la atención a las víctimas del metro Maelbeek en el día de los atentados.

“Hemos aprendido muchísimo, principalmente con respecto a la gestión y el cuidado de los pacientes. Si algo así vuelve a ocurrir, estamos más fuertes ahora”, aseguró a la televisión RTL.
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