BEIJING.- China elabora políticas para atraer a residentes de Taiwán a vivir y trabajar en la parte continental, señaló hoy un vocero del gobierno de Beijing con la intención de reducir las tensiones entre ambas partes. El portavoz de la Oficina de Asuntos de Taiwán del Consejo de Estado, An Fengshan, informó este miércoles que Beijing emitirá políticas para ofrecer incentivos en una serie de prestaciones que incluye entre otras, empleo y educación.
En su tradicional conferencia de prensa quincenal, el portavoz An Fengshan dijo que las medidas, que se extenderán en un momento todavía por determinar, tienen como objetivo impulsar la «integración económica y social entre las partes». Las políticas abarcarán el empleo, la seguridad social y las necesidades vitales, explicó An, quien reiteró que no solo facilitarán que los taiwaneses vivan y trabajen en la parte continental, sino que tienen como objetivo implementar la integración social y económica. En alusión a los comentarios de la administración de Taiwán sobre las empresas de la isla que operan en la parte continental, An señaló que China siempre ha animado y apoyado a las firmas de la isla y les da mucha importancia salvaguardando sus legítimos derechos.
«Solíamos hacerlo de esta manera y vamos a continuar haciéndolo en el futuro», afirmó An, quien replicó preguntando: «¿Quién está dificultando la cooperación económica a través del estrecho y la inversión de la isla en la parte continental? debemos verlo de forma clara». La reforma y apertura han creado enormes oportunidades de negocio, manifestó An, al asegurar que la parte continental seguirá animando a los empresarios de Taiwán a que se desarrollen en la parte continental y les dará más comodidad y oportunidades An también criticó los planes de una lideresa exiliada de una minoría étnica china que busca la independencia de la vasta región noroccidental de Xinjiang de visitar la antigua isla de Formosa.
Beijing congeló los contactos de gobierno a gobierno con Taiwán en junio por la negativa de la presidenta taiwanesa Tsai Ing-wen, para respaldar el concepto de una sola China. Alrededor de un millón de taiwaneses se cree que viven en China, ya sea a tiempo completo o parcial, sobre todo para el trabajo y el estudio. Gracias a su afinidad lingüística y cultural, los taiwaneses estaban entre los mayores inversores en China, cuando Beijing abrió su economía en las décadas de 1980 y 1990. En la isla culpan a China por el estancamiento de los salarios y una pérdida de la competitividad cuando la parte continental empezó a realizar productos manufacturados baratos en ámbitos de alta tecnología que Taiwán se había especializado en hacer.
Notimex/JRGA