VIENTIÁN.- Corea del Sur mantendrá diálogos de seguridad con Japón y Estados Unidos al margen del evento anual de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), con el fin de analizar las ambiciones nucleares de Corea del Norte. Los jefes diplomáticos de las potencias regionales y países de la región de Asia-Pacífico iniciaron este domingo el encuentro de tres días en la capital de Laos, Vientián, donde sostendrán una serie de reuniones lideradas por la ASEAN. El canciller surcoreano, Yun Byung-se, planea reunirse el lunes con su homólogo japonés Fumio Kishida y, más tarde, con el secretario de Estado estadunidense John Kerry, destacó la agencia Yonhap.
Un tema de interés común para las tres naciones es el desarrollo del programa nuclear de Corea del Norte. Desde 2006, el país comunista ha llevado a cabo cuatro ensayos nucleares pese a las advertencias de la comunidad internacional. Las tensiones en la península coreana permanecen en un alto nivel después del cuarto ensayo nuclear y el posterior lanzamiento de un misil de largo alcance llevados a cabo por Pyongyang en los primeros meses de este año. Los diálogos con los aliados de Seúl serán mantenidos antes de la celebración del Foro Regional de la ASEAN (ARF), que tendrá lugar el próximo martes con la asistencia de todos los integrantes de la mesa sixpartita nuclear. El régimen de Pyongyang disparó el 19 de julio tres misiles balísticos hacia el mar de Japón, después de que Seúl tomará la decisión de desplegar en su territorio un sistema avanzado antimisiles de Estados Unidos, informó el Estado Mayor Conjunto del ejército surcoreano.
Corea del Norte señaló que su último ensayo de misiles fue una simulación de ataques preventivos contra puertos y aeródromos en Corea del Sur, en una prueba que fue supervisada por el líder norcoreano Kim Jong-un. La agencia oficial norcoreana KCNA, sostuvo que el simulacro se llevó a cabo por las unidades de artillería Hwasong de la Fuerza Estratégica del ejército de Corea del Norte, encargadas de atacar las bases militares estadounidenses en Corea del Sur. El gobierno norcoreano protestó en contra de la decisión de despliegue del sistema de defensa estadounidense, reclamando que forma parte de una trama para invadir su país, además de amenazar de realizar acciones contra Seúl. Estados Unidos ha prometido ejercer una presión implacable sobre la cúpula norcoreana después de que Pyongyang llevase a cabo un nuevo lanzamiento de misiles en desafío a la comunidad internacional.
Notimex/JRGA