CIUDAD DE MÉXICO,-  Ya los Estados Unidos le han dado el «visto bueno» a la legalización de la marihuana y no creemos que el «vecino incómodo» no haya establecido ya las reglas del juego para que México, dentro de poco también apruebe el regular el uso medicinal y científico de dicha hierba.

En Estados Unidos el uso de la «hierbita» en cuatro estados -California, Maine, Massachussetts y Nevada-, habrá de obligar a México a destrabar la reforma para la regularización de la cannabis, sobre todo para arrebatarle a los cárteles del narcotráfico el negocio de la distribución y venta del enervante, así como para liberar  miles de personas que están en prisión por la portación de pequeñas dosis de esa droga.

Y es que la legalización de la cannabis en 29 estados de la Unión Americana ha dado como resultado inmediato en esa nación el control de la venta, el ingreso por tasas y la reducción de beneficios de los cárteles. Según un reporte del FBI, la marihuana es la fuente principal de ingresos de los cárteles mexicanos, y con la legalización, “el Estado está recaudando más impuestos y las mafias están dejando de percibir sumas millonarias de dinero”.

Tan sólo con la legalización de este enervanteen California, Maine, Massachusetts y Nevada, se prevé que el mercado de la marihuana para uso recreativo y medicinal en Estados Unidos crezca de 7 mil a 22 mil millones de dólares este año, según proyecciones de ArcView Group, una empresa que vincula a los inversionistas con empresas de cannabis.

Al respecto, un análisis de Bloomberg Intelligence destaca que de 32 compañías que cotizan en bolsa, en el segmento de “productos vinculados con cannabis”, el valor de las acciones cayó 7 por ciento el martes 8 de noviembre, día del referéndum en esos estados, aunque puntualiza que a pesar de ese descenso –que estaba concentrado en tres compañías farmacéuticas– el índice ha subido 181 por ciento en este año.

El reporte puntualiza que además de las compañías vinculadas con la producción de la marihuana, muchas de las cuales son firmas farmacéuticas, otros negocios pueden beneficiarse, como las compañías tabacaleras.

En este sentido, tanto el secretario de Salud, José Narro Robles, así como los senadores del PAN y PRD, Roberto Gil Zuarth y Armando Ríos Piter, respectivamente, coinciden en que el primer paso para la legalización de la cannabis en México es entrarle al tema de la despenalización de la droga, así como reglamentar su consumo para uso medicinal, a fin de ir abriendo la posibilidad de que en el corto plazo se apruebe una reforma para su legalización para uso lúdico.

No obstante, señalaron que en este tema el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto y sus bancadas en la Cámara de Diputados y en el Senado deben dejar de lado los cálculos político-electorales, como ocurrió con la reforma sobre matrimonios igualitarios.

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