RIO DE JANEIRO.- Al menos 60 muertos es el saldo que dejó un violento amotinamiento registrado en el complejo penitenciario Anísio Jobim (Compaj) en la ciudad de Manaus, en la región norte de Brasil, confirmaron fuentes oficiales.
La rebelión se dio por concluida al mediodía de este lunes, poco después de que entró al lugar el Batallón de Choque, tras 12 horas de enfrentamientos en el interior de la prisión, informó el secretario de Seguridad Pública del estado de Amazonas, Sergio Fontes. La cifra de víctimas oficial asciende a 60 y aunque no se precisó el número de heridos, se teme que el saldo mortal podría aumentar en las próximas horas. Las autoridades cerraron la cárcel y procedieron a una inspección interna, tras la cual en conferencia de prensa indicaron el número de cuerpos que encontraron y que serían trasladados para su identificación antes de entregarlos a sus familiares. Señalaron asimismo que al parecer algunos reclusos habrían logrado escapar durante el caos, pues la suma de los cuerpos con los reclusos presentes no coincidía con la cifra total de internos, por lo que llevarían a cabo un nuevo conteo para corroborarlo.
Si se confirma la estimación de víctimas, este violento episodio en la cárcel de Anísio Jobim sería el segundo mayor en términos de víctimas en la historia de Brasil, detrás del ocurrido en Carandiru, Sao Paulo, en 1992, que se saldó con 111 vidas. La rebelión comenzó la víspera con un enfrentamiento entre grupos de prisioneros rivales, presuntamente vinculados al tráfico de drogas, pero rápidamente dio origen a una batalla campal generalizada, de acuerdo con reportes del periódico brasileño O Globo. La entrada del Batallón de Choque fue posible hasta esta mañana después de negociaciones con los grupos que asumieron el control de la situación en el interior del penal, quienes habían tomado rehenes que más tarde fueron liberados. El centro penitenciario en cuestión fue construida para 454 reclusos, pero se cree que ha mantenido a casi 600.
NOTIMEX/JRGA