SEÚL.- Los tres partidos de la oposición de Corea del Sur acordaron hoy someter a votación una moción para enjuiciar a la presidenta Park Geun-hye, que se llevará a cabo el próximo 9 de diciembre. Después de aprobada, la moción del enjuiciamiento político de la presidenta debería ser revisada por el Tribunal Constitucional y este proceso, según las estimaciones, duraría de tres a cuatro meses. Por el momento, los legisladores prefieren que Park renuncie a la presidencia a título voluntario.

La presidenta de Corea del Sur está dispuesta a dejar su cargo si la Asamblea Nacional lo pide, anunció el pasado martes la misma mandataria, después de verse involucrada en el mayor escándalo político de los últimos años. Park se enfrenta a la mayor crisis de su carrera política debido al escándalo de tráfico de influencias centrado en su amiga y confidente, Choi Soon-sil, y en algunos de sus ex jefes secretarios presidenciales. Choi es sospechosa de ejercer influencia en los asuntos estatales y de obtener beneficios a través de su lazos estrechos con la presidenta. Las tres formaciones se proponen convencer a los diputados de Saenuri (Partido de las Nuevas Fronteras) de que “voten a favor del impeachment en una semana”, incluso si la oficina presidencial anuncia un plan de retirada voluntaria de Park.

A finales de octubre trascendió que una antigua amiga de la presidenta, Choi Soon-sil, ahora bajo arresto, había aprovechado su relación con Park para presionar a medio centenar de empresas locales para que donaran sumas importantes a dos fundaciones sin ánimo de lucro. Los tres partidos de la oposición planean proponer la moción, y acordaron persuadir a los miembros desleales del gubernamental Partido Saenuri para que formen parte en la votación. La aprobación de la moción requiere la votación a favor de por lo menos 200 de los 300 legisladores de la Asamblea Nacional. Al menos, 28 miembros de Saenuri deben apoyar la moción, incluso si toda la oposición y los legisladores independientes votan a favor del enjuiciamiento político de la presidenta.

Notimex/JRGA