MADRID.- El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) definirá mañana, sábado, en reunión de su Comité Federal el rumbo a tomar para intentar salir de la crisis que vive, derivada de divisiones internas sobre un posible apoyo a Mariano Rajoy para que renueve su mandato. La formación opositora llegó a esta crisis por las críticas que genera la negativa de su secretario general, Pedro Sánchez, a favorecer (directa o indirectamente) a Rajoy, del conservador Partido Popular, para que forme el gobierno.
Tras los comicios de junio pasado, el PSOE rechazó la candidatura de Rajoy en la votación de investidura celebrada del 30 de agosto al 2 de septiembre, por lo que la posibilidad de que se convoque a terceras elecciones en diciembre próximo, genera presión a esta formación. Dentro del partido se originaron divisiones ya que algunos dirigentes están en desacuerdo con Sánchez, pero la crisis se agudizó el pasado lunes debido a los malos resultados de las elecciones locales en el País Vasco y Galicia (norte de España), el fin de semana. La respuesta de Sánchez a ello fue proponer elecciones internas para elegir a un nuevo secretario general y un Congreso en diciembre próximo, y en el proceso de investidura presidencial buscar una alternativa que no sea la de Rajoy. Con esa propuesta se generaron las principales críticas, debido a que Sánchez fracasó en marzo pasado cuando intentó el apoyo de la centroderecha Ciudadanos y la izquierda Podemos, obteniendo sólo el respaldo de la primera de ellas. Sánchez culpa a sus críticos de querer forzar su dimisión y negociar con Rajoy una abstención que le permita acceder a nuevo mandado en el gobierno.
Como respuesta, la mitad de los miembros de la Comisión Ejecutiva Federal presentó su dimisión para tratar de dejar sin validez las decisiones de Sánchez, pero los demás miembros respaldaron las propuestas del dirigente. La división generó que casi todos los dirigentes en el país se hayan posicionado a un lado u otro, incluso el expresidente Felipe González criticó a Sánchez por su postura y reveló que le había asegurado la abstención del PSOE en la investidura de Rajoy. A pesar de la crisis, Sánchez siguió con sus propuestas y sus críticos le acusaron de atrincherarse e impedir el paso a la sede socialista de la calle Ferraz de Madrid a todos los renunciaron a su Comisión Ejecutiva. La reunión del Comité Federal de este sábado se celebrará con la tensión generada estos días, e incluso un dispositivo policial vigilará en el exterior de la sede del PSOE para evitar enfrentamientos entre partidarios de unos y otros.
Notimex/JRGA