Que contrariedad, Le Pen y su partido, se queda sin fondos | Digitall Post : Digitall Post
Internacional amistad banco-ruso campana carece dinero figura fondos Francia le pen prestamo putin reaccionaria

Que contrariedad, Le Pen y su partido, se queda sin fondos

Que contrariedad, Le Pen y su partido, se queda sin fondos

PARÍS,- El cierre del banco ruso que hizo un préstamo de 9 millones de euros al Frente Nacional que encabeza Marine Le Pen, se convierte en una contrariedad y deja al partido en una situación difícil a pocos meses de las elecciones generales y legislativas. Esto además de ser un debate francés también es motivo de disputa entre Estados Unidos y Rusia.

El semanario satírico francés Le Canard Enchainé hacía pública una comunicación delparlamentario norteamericano James Turner donde denunciaba que en febrero pasado Marine Le Pen había «pedido a Rusia 30 millones de dólares para sufragar su campaña para las presidenciales de 2017».

Turner, republicado, envió su nota al Director de Inteligencia Nacional, el organismo que coordina a las 17 agencias de espionaje de Estados Unidos. El miembro de la Cámara de representantes alertaba de que Le Pen podrían reconocer Crime como territorio ruso su ganaba las elecciones.



Los responsables del Frente Nacional desmintieron la información tachándola de «elucubración folklórica», en el caso del Secretario General del partido, Nicolas Bay. El responsable de finanzas del FN, Wallerand de Saint-Just, desautorizaba la nota del parlamentario norteamericano diciendo que no se pide dinero prestado a un país, como dice la comunicación, sino a un banco. Por su parte, la jefa de la organización, Marine Le Pen, dijo no haber contraido ningún crédito, pero no negó expresamente haberlo pedido.

Rusia adopta la estrategia de “el enemigo de mi enemigo es mi amigo”. El país que hace campaña contra el fascismo extiende lazos de colaboración con las fuerzas más reaccionarias de Europa

La alerta del aparato de la inteligencia norteamericana sobre Le Pen no es nueva, pero ha vuelto a poner bajo los focos la polémica sobre la financiación de los partidos políticos en Francia, y en especial, del FN. El Frente Nacional es sistemáticamente boicoteado por los bancos franceses, que le niegan los créditos necesarios para el pago de sus campañas electorales. Fuentes del partido señalan que ya en 2013 cuatro bancos franceses (Le Crédit Lyonnais, Crédit Agricole, BNP y el CIC, y el suizo UBS rechazaron los préstamos.

En 2014 el banco ruso First Czech Russian Bank (FCRB), ahora cerrado, le concedió un crédito de nueve millones de euros. Desde entonces, a Le Pen se le considera uno de los resortes principales de Vladímir Putin en Francia, su principal baza política, según los denunciantes del «putinismo rampante». El FN no pudo mantener el secreto de su financiación rusa, revelada por la prensa. A Saint-Just no le quedó más remedio que admitir el origen ruso de sus fondos, declarando: «El partido hace peticiones a bancos extranjeros. ¿Por qué no bancos rusos?». Los préstamos parecen un hecho, aunque hay quien pone en duda que sea realmente la mano del Kremlin la que esté detrás de ellos.



De hecho, al parecer, el FN contaba con que el FCRB les aportase otro crédito por valor de 29,3 millones de dólares con los que cubrir los costes de las dos grandes citas electorales de 2017. Sin embargo, el pasado julio, el Banco Central de Rusia revocó la licencia de dicha entidad, dejando las cuentas del partido pendientes de un hilo. Pero sus portavoces señalan que si los bancos franceses les cierran las puertas, ellos están dispuestos- como en el pasado reciente- a buscar dinero en cualquier lugar del mundo, desde Europa a América e, incluso, ahora, en Oriente Próximo.

Para el Secretario General del FN, lo que es una desgracia es que los bancos franceses no respeten el juego de la democracia. «Es un verdadero problema de discriminación fundado sobre las opiniones políticas, lo cual está prohibido por la ley», asevera Nicolas Bay. El número 2 del partido y cerebro adjunto de Marine Le Pen, Florian Philippot, afirma que es necesaria una ley que obligue a los bancos a prestar a todos los candidatos. «Es verdad que no somos los amigos de las grandes finanzas», ironiza sobre el programa económico del FN, «pero la actitud de los bancos no es democrática».

Que la hija del viejo líder Jean Marie se ha convertido en un personaje alabado en Moscú es innegable. Como lo es, según denuncian algunos medios franceses, la relación de su padre con oligarcas cercanos al Presidente ruso, en especial con Konstantin Malofeev, considerado como «el Rasputin de los tiempos modernos» o «el Soros de Putin». Entre otras cosas, se considera a Malofeev como el financiador de los grupos militares prorusos en el Este de Ucrania.

Marine Le Pen no solo cuenta con «el oro de Moscú»; también ha visto en el Golfo Pérsico (o árabe) otra posibilidad de financiación. Pero esta vez, y a diferencia de Hollande o antes Sarkozy, sus esperanzas no están puestas en Qatar o Arabia Saudí, sino en los Emiratos Árabes Unidos.

EL FN necesita 12 millones para pagar los gastos de las presidenciales de 2017, y otros 15 para las legislativas del mismo año. Para Marine Le Pen existiría un plan B que le produciría más urticaria que depender de un banco ruso o emiratí: pedir dinero prestado a su padre. Después de haberse alejado del tufo fascista de su progenitor, sería un precio que el jefe de la dinastía le haría pagar muy caro.
r3