SEÚL.- Corea del Sur anunció su intención de reforzar sus medidas de disuasión contra las amenazas nucleares y de misiles de Pyongyang en base a las capacidades de defensa conjuntas con Estados Unidos, para derribar misiles balísticos norcoreanos.

La medida se da tras el lanzamiento de un misil balístico desde un submarino realizado la víspera por Corea del Norte, destacó la agencia Yonhap. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Cho June-hyuck, condenó la nueva provocación norcoreana, llevada a cabo pese a las sanciones implementadas en su contra y los reiterados llamamientos de la comunidad internacional. Cho añadió que no aceptan más provocaciones de Pyongyang, incluido el lanzamiento de un misil Musudan el 22 de junio, y que cooperará estrechamente con países extranjeros para la implementación de las sanciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) contra el Norte, además de reforzar la presión contra el régimen comunista. Corea del Norte disparó el sábado un misil desde un submarino en las aguas de la ciudad portuaria de Sinpo, en la provincia de Hamgyong del Sur, aunque el misil falló en su etapa inicial de vuelo, según anunció el Estado Mayor Conjunto (JCS) de Corea del Sur.

El lanzamiento es la última demostración de fuerza de Pyongyang y tiene lugar un día después de que surcorea y Estados Unidos anunciaron el despliegue del Sistema de Defensa Terminal de Área a Gran Altitud (THAAD) en territorio de Corea del Sur ante las amenazas nucleares y de misiles balísticos de Corea del Norte. Asimismo, esta semana, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos incluyó en la lista negra al líder norcoreano, Kim Jong-un, y a otros 22 funcionarios y entidades de Corea del Norte por sus crímenes de lesa humanidad. La medida es la primera implementada directamente contra el gobierno norcoreano. El Norte protestó la decisión estadounidense, diciendo que la medida cruza «la línea roja».

Notimex/JRGA