ANKARA.- La tensión entre Turquía e Irak se elevó hoy luego que el primer ministro iraquí, Haider al Abadi, advirtió que Ankara se arriesga a desencadenar “una guerra regional” por prolongar su presencia militar en territorio iraquí. En medio de esta situación, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irak citó al embajador turco en Bagdad, Faruk Kaymakc, para transmitirle una protesta y el rechazo de Bagdad a la prolongación de la presencia militar turca en suelo iraquí.
Poco antes, el gobierno turco también convocó al embajador iraquí en Ankara, Husam al-Alawi, para protestar por la condena del Parlamento de Irak a la presencia de tropas turcas en territorio iraquí, según la agencia turca de noticias Anadolu. Con el fin de entrenar a las fuerzas iraquíes, alrededor de 300 soldados turcos se encuentran en la base iraquí de Bashiqa, a unos 15 kilómetros al este de Mosul, la segunda ciudad de Irak y ocupada por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) desde 2014. El viceprimer ministro turco, Numan Kurtulmus, aseguró que sus tropas en Irak no quieren convertirse en una fuerza ocupante, sino que sólo buscan la estabilidad en un momento en el que el país está profundamente dividido. El Parlamento turco aprobó la semana pasada la ampliación durante un año de su operación militar en Irak y Siria para combatir a las organizaciones terrorista, en referencia a los milicianos kurdos y al EI.
El mandato permite acciones militares en los dos países vecinos para combatir al EI y a otros grupos que Ankara considera organizaciones terroristas, como las Unidades de Protección Popular (YPG) y el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). El Parlamento iraquí ha condenado la prolongación de la presencia de las tropas turcas en Irak y pidió al Ejecutivo “tomar todas las medidas legales y diplomáticos para salvaguardar la soberanía” de su país ante la “ocupación hostil” del territorio iraquí por Turquía. En conferencia de prensa celebrada anoche en Bagdad, el primer ministro iraquí también repudió la decisión tomada por el Parlamento de Turquía para prolongar hasta octubre de 2017 su misión militar en Irak y Siria. “Hemos pedido a la parte turca más de una vez que no intervenga en los asuntos iraquíes y temo que la aventura turca podría convertirse en una guerra regional”, advirtió. “La conducta de los dirigentes turcos no es aceptable y no queremos vernos inmersos en una confrontación militar con Turquía”, agregó al Abadi. Además de su presencia militar en Irak, Turquía lanzó el pasado 24 de agosto la operación Escudo del Éufrates para expulsar a los yihadistas del EI de las localidades fronterizas del norte de Siria.
NOTIMEX/JRGA