CIUDAD DE MÉXICO,- Frente a los hechos el grado de credibilidad en los gobernantes ha tenido un descrédito mayúsculo, porque los niveles de corrupción en México se han convertido en un grave problema que en este momento los niveles de corrupción superan en la actualidad los índices de pobreza y desempleo.
En su segunda edición del informe Anatomía de la Corrupción estudio elaborado por la organización civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, que ofrece dato sobre el problema que genera corrupción en el país.
De acuerdo a información citada por The Huffington Post, con base en Índice de Percepción de la Corrupción de Transparencia Internacional, de 2008 a 2015, México descendió 23 posiciones en dicho indicador, lo cual se encuentra en línea con las cifras de Foro Económico Mundial, que ubica a México en el lugar 13 a nivel mundial de los países más corruptos.
Los datos señalados indican que el 79 por ciento de los mexicanos perciban a la corrupción como el mayor problema de la sociedad.
“Los mexicanos perciben que la corrupción es un problema tan grande incluso por encima de la pobreza y el desempleo, que uno pensaría que son los dos problemas que más nos afectan directamente. El primero es, desde luego, la violencia, pero el segundo es la corrupción. Y muy dramáticamente pensamos que en cinco años vamos a estar peor. Ese es el tamaño de la deslegitimidad de nuestras instituciones”, señala María Amparo Casar, presidenta ejecutiva de MCCI, citada por el medio.
El estudio señala que la corrupción no sólo se manifiesta en el gobierno, sino también en el sector privado, ya que, por ejemplo, 44 por ciento de las empresas en México realizan pagos extraoficiales a funcionarios públicos, según la Encuesta de Fraude y Corrupción de KPMG.
The Huffington Post, señala que una cifra que hace de México el país más corrupto es el pago de sobornos por parte de las empresas al gobierno, quedando sólo detrás de Rusia, según datos del Índice de Fuentes de Soborno realizado por Transparencia Internacional.
“La corrupción imperante en México ha provocado que, ante la ineficiencia de las instituciones, el dinero destinado al combate a la corrupción prácticamente haya sido tirado a la basura. Un ejemplo de esto, se encuentra en que desde 2008 se ha duplicado el presupuesto para el combate a la corrupción, aun cuando “gastamos más y cada vez estamos peor”, según explica Casar.
Así pues, en este mismo contexto, Poco más de 60 organizaciones de América Latina, especializadas en el desarrollo de políticas públicas, debatirán en los próximos dos días en México como fortalecer el trabajo de los ciudadanos para impulsar un mejor combate a la corrupción e impulsar una mayor transparencia en el ejercicio de los recursos públicos.
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