* El tirador perdió el arma al intentar huir

La manifestación de los comerciantes se desarrollaba sin incidentes en el zócalo de Cuernavaca.

Pero repentinamente, un sujeto armado arremetió a balazos contra dos personas que encabezaban la protesta.

Se trataba de Jesús García Rodríguez, secretario general de la Sección 15 de la Confederación de Trabajadores de México, y Roberto Castrejón, hijo del primer secretario general sustituto de la misma organización.

Al agresor, identificado como Max «H», poco le importó que alrededor hubiera reporteros, incluso pasó encima de ellos para tener a tiro a sus víctimas.

Así, disparó primero contra Castrejón; después contra García Rodríguez.

En el proceso, también hirió a Rafael, hermano del primero, y al camarógrafo René Pérez.

Tras ello, emprendió la huída mientras no dejaba de soltar balazos, y es que policías y comerciantes lo perseguían.

Sin embargo, en la carrera perdió el arma y finalmente pudo ser detenido por uniformados de la zona.

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Los «servicios» del tirador de Cuernavaca

El presunto homicida fue identificado en redes sociales, donde se reveló un poco de información sobre su vida.

Sin embargo, las autoridades lograron recolectar más datos sobre el detenido.

El arma que usó fue una Glock nueve milímetros que se sospecha perteneció en algún momento a una corporación policial.

«Pudo estar a disposición de la Fiscalía en noviembre del 2017», declaró el fiscal Uriel Carmona.

Además, en el lugar encontraron un celular marca Nokia, presuntamente también propiedad del tirador.

La información contenida en el teléfono sugirió que el joven recibió la orden de asesinar a ambos hombres.

Por tales «servicios» habría cobrado dos mil 500 pesos por cada uno.

Es decir, la vida de ambos hombres tuvo un precio de cinco mil pesos, según la información preliminar.

Imagen: FB