MÉXICO.- Con motivo del Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, la organización Amnistía Internacional (AI), denunció que en México, el Gobierno lleva a cabo este tipo de prácticas, con el fin de acallar a grupos de oposición o perseguir a minorías étnicas.

Por tal motivo, solicitó su compromiso para acabar con esta situación a la que calificó como «atroz».

De acuerdo con Amnistía Internacional y con datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), hoy en día, siguen abiertos 44 mil 159 casos en 91 Estados –registrados desde 1980–.

Amnistía Internacional precisa que el ‘modus operandi’ de las desapariciones forzadas es siempre el mismo: las víctimas son detenidas en su casa o en la calle, sin que jamás se les comunique a las familias su paradero, y a menudo sufren torturas y viven con el temor constante a que las maten.

En México, según AI, el mejor ejemplo de la desaparición forzada, tuvo lugar en septiembre del 2014, con los 43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa, quienes fueron atracados por la policía y hombres armados en Iguala, Guerrero.

Casi dos años después, sólo se ha encontrado el cuerpo de uno de ellos, mientras que los 42 restantes continúan en paradero desconocido, recuerda la organización.

Finalmente y con los datos de la ONU, en otros países como Camerún, Sri Lanka, Turquía, Bosnia Herzegovina o Serbia, se han documentado desde 1980 un total de 55 mil 273 casos de desapariciones forzadas, de los que 44 mil 159 siguen abiertos.

Según estas cifras, los diez países con mayor número de desaparecidos registrados desde 1980 son Irak (16 mil 560), Sri Lanka (12 mil 349), Argentina (3 mil 446), Argelia (3 mil 168), Guatemala (3 mil 154), Perú (3 mil 6), El Salvador (2 mil 673), Colombia (mil 260), Chile (907) y Filipinas (786).

con información de Amnistía Internacional

jcrh