MÉXICO.- El gremio de los médicos, se encuentra ahora en la mira de las organizaciones criminales. Especialmente en aquellos estados, con elevados índices de violencia. De esta tendencia espeluznante no se salvan ni siquiera los becarios que prestan sus servicios sociales en comunidades apartadas.

Entre 2007 y 2015, hubo 84 denuncias contra estudiantes de medicina en 21 estados. En el mismo lapso, hubo siete homicidios de los llamados «pasantes».

Una de las teorías, sobre porqué los galenos son ahora objeto de agresiones, tiene que ver con la naturaleza de su profesión, ya que acaban envueltos involuntariamente en guerras entre bandas criminales. Esto de acuerdo con el experto en seguridad Alejandro Hope.

A menudo les llevan a un herido de un enfrentamiento entre delincuentes y quedan por ese hecho sujetos a una amenaza doble. Si el paciente muere, la banda en cuestión le cobra el deceso al médico. Si se salva, la banda rival lo puede ver como un aliado de los adversarios», explica.

El pasado 22 de junio, miles de médicos del Sistema Estatal de Salud realizaron un paro nacional salieron a las calles en unas 80 ciudades del país a manifestarse para gritar un «Ya Basta» a las agresiones contra sus compañeros.

Durante las marchas señalaron que muchos de los futuros médicos deben cubrir espacios controlados por el crimen e intentar sortear la violencia sin ser víctimas por lo que el 70% de los pasantes han sufrido violencia durante sus prácticas.

Los médicos además deben lidiar con frecuencia con la violencia y las amenazas de los pacientes o sus familiares.

En algunos estados, ha sido inclusive necesario suspender las campañas de inmunización por no existir las garantías suficientes para evitar actos de violencia en su contra y en otros los estudiantes a punto de graduarse se niegan a hacer su servicio social en zonas peligrosas.

No se puede permitir que los proveedores de los servicios de salud vivan bajo amenaza permanente. Muchos de ellos están dispuestos a enfrentar sacrificios, pero no les podemos pedir que sean mártires», señaló Hope.

Finalmente, debemos señalar que en el marco de la escalada de violencia que desde hace una década azota a México, en total han perdido la vida 184.000 personas.

jcrh