MÉXICO.- Arturo Peimbert, defensor de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (Ddhpo), señaló que durante el operativo policiaco del pasado 19 de junio, llevado a cabo en Nochixtlán, autoridades federales violentaron derechos humanos tanto de pobladores como de niños.
De acuerdo con el activista, es necesario que se conozca el objetivo de dicho operativo, en el cual ocho personas perdieron la vida y más de 190 resultaron heridas.
Explicó que 15 minutos después de la incursión de la Policía Federal para liberar la carretera que estaba tomada por los pobladores, los policías avanzaron hacia el centro comunidad y a la colonia 20 de noviembre donde tuvieron que huir unos 30 menores que estaban en una escuela protegiéndose con tierra del gas lacrimógeno.
Según los testimonios recabados, el obudsman de Oaxaca indica que no se siguieron los protocolos pertinentes para el uso de gas lacrimógeno, ya que este debe ser lanzado con una trayectoria de parábola, a fin de no lesionar a las personas, pero, hay evidencias de que se empleó de manera frontal.
Peimbert aseguró que según cifras preliminares, hubo 198 heridos, 155 de ellos son civiles y 43 son policías, de los cuales 84 por disparos de armas de fuego. Expresó que 23 lesionados ya están en hospitales de alta especialidad, pero muchos de ellos no han acudido a recibir ayuda por temor.
Igualmente destacó que hay conocimiento de que un hospital comunitario de Nochixtlán, fue tomado por la Policía Federal, impidiendo que el personal médico, pudiera atender a la población civil.
Finalmente, el defensor de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca criticó que ante la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas han encontrado grandes barreras, que hace la revictimización de los pobladores de Nochixtlán, por lo que pidió un punto de acuerdo para atender a lesionados, así como a las familias de las víctimas mortales.
jcrh