Diego Cruz Alonso, conocido informalmente como parte de“Los Porkys de Costa de Oro” y responsable de abusar sexualmente de Daphne Fernández, intentó burlar a la ley mexicana y meses atrás se estableció en España, en donde tenía planeado rehacer su vida al ser mexicano acreedor de nacionalidad española. Es acusado de «pederastia tumultuaria», ya que el abuso sexual contra la joven mexicana fue cometido con otros jóvenes en Veracruz.
Este viernes, la Audiencia Nacional de España aprobó la extradición del joven violador a México, tras ser reconocido como abusador sexual de una joven menor de edad en Veracruz. El acusado había solicitado el miércoles pasado que no fuese extraditado, además de declararse a sí mismo «inocente» de lo que se le acusa.
Los magistrados españoles no aceptaron los argumentos de la defensa de Diego Cruz Alonso y decidieron que éste será enviado a México donde debe ser acusado de pederastia, y juzgado por dicha fechoría; de acuerdo a informes de Univisión. Sin embargo todavía existe la posibilidad de que los abogados interpongan un recurso ante el Pleno de la Sala Penal de la Audiencia Nacional.
Cruz Alonso fue arrestado el pasado 10 de junio en Madrid, ante la existencia de una orden de extradición. El joven agresor jamás imaginó que iba a ser detenido en suelo extranjero pues alegados aseguran que ya se sentía libre de peligro y exento de ser juzgado en territorio extranjero. Gozaba de una vida acomodada y sin ser reconocido como un criminal.
El miércoles, Diego Cruz Alonso leyó un texto (el cual terminó de leer en llanto) en el cual se declaró inocente, y reafirmó haber sido acusado injustamente de «mentiras, de las que no existen pruebas”, develó que únicamente hay hechos a su favor, por lo que «explicó» que todo se debe a una extorsión, misma que se ha engrandecido a través de los medios de comunicación en México.
También mencionó a Javier Fernández, padre de la víctima; de ser el responsable de organizar todo bajo «secuestro, extorsión y amenazas de muerte”, con las cuales denuncia que se les obligó a grabar un video de disculpas, y además les pidió cuatro millones de pesos para daños morales de la joven menor.
El padre de la menor exige que se haga justicia con los cuatro violadores.
“Nos obligó. No hubo otra opción, dijo después que nos mataría, había gente afuera de nuestras casas, eran criminales. Fue una elaborada extorsión y los medios de comunicación hicieron eco mediático en medio de unas elecciones”, añadió el Porky con voz temblorosa.
Acentuó que él es una «víctima más de un escándalo mediático” para distraer a la ciudadanía, en tiempos difíciles, especialmente en Veracruz debido a la situación crítica por la que atraviesas desde hace meses el estado. A partir de eso surge el apodo de “Porkys de Veracruz” o “Porkys de la Costa de Oro”, con el fin de intentar distraer a los mexicanos con una historia ante la cual se han visto envueltos, según el joven agresor.
En su escrito aseguró que antes de salir de México el día 29 de marzo pasado, ya se había presentado cuatro veces al juzgado a declarar y nadie le informó sobre medidas en su contra que le impidieran salir del país.