MÉXICO.- Diversos especialistas, cuestionan la manera en la cual fue aprobada la iniciativa cuidadana, conocida como Ley 3de3. Esto, porque se llevó a cabo su aprobación sin que se obligue a publicitar las declaraciones patrimonial, fiscal y de conflicto de interés. De esta manera, se pierde su objetivo inicial y en consecuencia, no abona al combate a la corrupción ni a la recuperación de la confianza que la ciudadanía perdió en sus gobernantes.

María Elena Pérez Jaen, excomisionada del extinto Instituto Federal de Acceso a la Información (Ifai), consideró que la discrecionalidad con la que quedó la Ley 3de3, representa un retroceso en el combate a la corrupción.

Afirmó que si bien la aprobación del Sistema Nacional Anticorrupción es un avance en el tema, que los senadores del PRI y Partido Verde —principalmente— se hayan opuesto a que los funcionarios hagan públicas sus declaraciones fiscal, patrimonial y de intereses, representa un retroceso para la ciudadanía.

Por su parte, Guillermo Cejudo, académico del CIDE, cuestionó que no se haya aprobado la obligatoriedad de que los servidores hagan públicas sus tres declaraciones, toda vez que ello es una de las partes importantes del combate a la corrupción.

Lamentablemente, dijo, no hay nada más que hacer en el Congreso, toda vez que en la Cámara de Diputados PRI y Partido Verde hacen mayoría y son quienes se oponen a la publicidad.  María Marván Laborde, excomisionada del Ifai, manifestó que la esencia de la Ley 3de3 se pierde porque no habrá una publicidad total

Cuestionó a los legisladores por manifestar en el discurso voluntad de convertir a México en un País transparente, pero “la realidad es otra”. Señaló que ante el hartazgo de la ciudadanía se esperaban medidas drásticas, por lo que “me quedo con un mal sabor de boca; era el momento para reconstruir la confianza (en los políticos)”, añadió.

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