Gran parte del aire de Europa tiene ahora más radioactividad tras un «incidente menor» en una instalación nuclear en Rusia. Ante el hecho, el Instituto de Protección Radiológica y Seguridad Nuclear (IRSN por sus siglas en francés) señaló que la emisión del isotopo rutenio-106 no es peligrosa para la salud o el ambiente.

Según el IRSN la “zona verosímil de liberación” fue entre el río Volga y los montes Urales. Además, sugirió realizar controles al azar a los alimentos importados de la región.

Por si fuera poco, el mismo instituto fue quien señaló que el rutenio provenía aparentemente de un accidente con combustible nuclear o por la producción de material radioactivo, no de un reactor nuclear porque en ese caso hubiera liberado otros elementos.

En Alemania, la Oficina Federal de Protección de la Radiación dijo que se registraron niveles elevados de rutenio en el país, además de en Italia, Austria, Suiza y Francia desde el 29 de septiembre, pero que no significaba una amenaza para la salud pública.

Cuando aparecieron los primeros informes de una pérdida de rutenio-106 de una planta en el sur de los Urales, la empresa estatal rusa Rostacom negó que proviniera de sus instalaciones. “La denuncia de que la contaminación tuvo un origen ruso es infundada”, aseguró.

El rutenio se usa para tratar tumores de ojo y a veces como fuente de energía para los satélites.

La agencia francesa dijo que la liberación de rutenio también pudo deberse al reingreso de un satélite a la atmósfera terrestre, pero que según la Agencia Internacional de Energía Atómica, no se produjo tal hecho en el período en cuestión.

También te puede interesar:

El agujero de la capa de ozono se reduce más desde 1998

Papa Francisco advierte consecuencias catastróficas por Trump