El matrimonio a una edad temprana deniega a las niñas y niños disfrutar su infancia, interrumpe su educación, limita sus oportunidades, aumenta el riesgo de violencia y abuso, pone en peligro su salud, priva sus perspectivas de largo plazo y constituye un obstáculo para su desarrollo.

Con la finalidad de establecer la edad mínima de 18 años para contraer matrimonio sin excepción, el Pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), aprobó con 39 votos a favor, 0 en contra y 0 abstenciones, un dictamen por el que se reforman y derogan diversas disposiciones al Código Civil.

El dictamen fue presentado por la Comisión de Administración y Procuración de Justicia de este órgano legislativo, que preside el diputado Israel Betanzos Cortés, coordinador también del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Asimismo, esta iniciativa fue remitida anteriormente el 28 de marzo por el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa, toda vez que atiende a un exhorto que el Senado de la República emitió el 18 de febrero de este año dirigido a congresos estatales y a la Asamblea Legislativa.

Con esta aprobación se eliminan las excepciones que el ordenamiento vigente del Código Civil del Distrito Federal establecía, donde se señalaba la posibilidad de casarse a partir de los 16 años.

Cabe mencionar que esta norma se armoniza con el Código Civil Federal, la Ley General de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, reformada el 4 de diciembre de 2014, y la Ley de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de la Ciudad de México, cuya reforma fue publicada en la Gaceta Oficial el 12 de noviembre de 2015.

A nombre de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, el diputado José Manuel Delgadillo Moreno, del Partido Acción Nacional (PAN), destacó que el matrimonio precoz afecta todos los aspectos de la vida de las niñas y niños.

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