CIUDAD DE MÉXICO,- El candidato de Estados Unidos Donald Trump, debe replantear su discurso y ofrecer una disculpa pública a los mexicanos, y que se comprometa a no tener una relación fascista y sobre todo racista, no sólo contra de los connacionales, porque no es sólo un tema de México, es un tema de racismo contra los latinos y varios sectores de la población, lo que lo define como una persona no apta para gobernar.
Ante la visita de Donald Trump a México, el diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD), en la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México (ALDF), Mauricio Toledo reprobó la decisión del gobierno federal de aceptar su ingreso al país.
Dijo el legislador que es un desatino del presidente de la república Enrique Peña Nieto, reciba al que ha insultado de manera recurrente y permanente a los mexicanos, además de amenazar y desacreditar el trabajo de nuestros compatriotas en Estados Unidos.
Indicó el diputado del PRD, que Donald Trump, es alguien que tiene una política exterior bélica y ha confirmado que construirá un muro entre México y Estados Unidos como en los peores tiempos de la Guerra Fría del muro de Berlín.
En cuanto la confirmación de la visita ante la Presidencia de la República , Mauricio Toledo reconoció que el gobierno federal no podía negarse porque resultaría contradictorio y caería en el juego del republicano.
“Peña Nieto fue un hombre sensato, yo diría hasta ingenuo, al haber aceptado la visita de Donald Trump a México, ya que de haberlo rechazado hubiera quedado como mártir, alegando que él quería dialogar y platicar con el presidente para replantear una nueva relación. Ahora que aceptó, debería pedirle retractarse en el tema de la construcción del muro y de su política de odio”, aseveró.
Ante la propuesta de Toledo, en el pleno de la ALDF se sumaron al punto de acuerdo los grupos parlamentarios de Morena, PAN Y PES, y se planteó declarar a Trump moralmente una persona non grata en México.
Finalmente, el diputado del sol azteca reiteró los tres puntos que serán discutidos en esta soberanía:
Los legisladores de la ALDF , coincidieron en señalar que durante los meses pasados, como precandidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, y ahora como candidato oficial, Donald Trump se ha empeñado en construir un mensaje de odio y división entre México y Estados Unidos, utilizando una retórica racista y xenófoba propia del pensamiento fascista.
Explican que como consecuencia de esta radicalización en la postura, la derecha conservadora estadounidense ha logrado imponer de manera oficial en la plataforma electoral del Partido Republicano propuestas graves y absurdas que amenazan las relaciones históricas de amistad y cooperación entre ambas naciones, como la de “construir una barrera física que cubra por completo la frontera sur con México y sea suficiente para obstruir el tráfico vehicular y de personas”.
Por su parte diputados federales señalan que la administración del presidente Peña Nieto es la principal responsable de que los sectores más conservadores en Estados Unidos vean a México como una fuente de problemas, más que como a un buen vecino.
Las posturas radicales de Trump han encontrado campo fértil en la derecha retrógrada gracias a la imagen que la administración peñista ha forjado de México como un país gangrenado por la corrupción, invadido por el narcotráfico y en donde los casos de violencia aumentan progresivamente.
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