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Mejorar la calidad de vida de los internos

Mejorar la calidad de vida de los internos

CIUDAD DE MÉXICO,-   Los trabajos del Segundo Congreso Penitenciario son con el objetivo de promover una visión integral para un sistema penitenciario moderno, profesional, eficiente, respetuoso de los derechos humanos y de la calidad de vida de las personas reclusas. La Comisión Nacional de Seguridad y el Consejo Mexicano de la Sociedad de Estudios Internacionales inauguraron dichos trabajos.

El Comisionado Nacional de Seguridad (CNS), Maestro Renato Sales Heredia, al inaugurar los trabajos de este Congreso, señaló que el sistema penitenciario es el eslabón fundamental de la cadena del sistema de justicia y la seguridad pública.

Indicó que sus principales objetivos son la reinserción social efectiva y la seguridad de la colectividad penitenciaria, que son todas las personas, tanto las privadas de su libertad, como el personal penitenciario y los visitantes. Y añadió, “por ello, una de nuestras labores más importantes es focalizar nuestros esfuerzos en el personal penitenciario, para que trabaje en condiciones dignas y con la adecuada remuneración, así como con oportunidades de desarrollo”.



Tras felicitar a los organizadores de este congreso, el Titular del Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social, Licenciado Eduardo Guerrero Durán, aseguró que este encuentro promoverá la reflexión y el intercambio de ideas sobre nuestro sistema penitenciario, al proceder al análisis y a la crítica con base en criterios científicos y técnicos para emprender con urgencia la necesaria transformación de esta institución.

En este sentido, apuntó que “no es sólo con recursos y voluntad política como el sistema penitenciario nacional dejará de ser visto como el último eslabón y va a situarse en el lugar que verdaderamente debe poseer, con una visión de prevención social de la delincuencia y como parte fundamental del sistema nacional de seguridad y como eje estratégico del Sistema Penal Acusatorio”.

Esta estrategia –enumeró– está basada en siete ejes rectores:

Garantizar el derecho a las personas privadas de la libertad a partir de lograr la gobernabilidad en los centros penitenciarios, reduciendo los niveles de hacinamiento y de sobre población en los centros penitenciarios estatales. Lograr el mejoramiento y la ampliación de la infraestructura penitenciaria; Fortalecer la infraestructura tecnológica y consolidar la capacitación y profesionalización del capital humano del sistema penitenciario nacional



También lograr la estandarización de todos los procesos y procedimientos de este sistema; desarrollar un sistema integral para la reinserción social de las personas sentenciadas privadas de su libertad e implementar la Ley Nacional de Ejecución Penal.

Guerrero Durán apuntó que desde la Secretaría de Gobernación, a través de la Comisión Nacional de Seguridad, “estamos convencidos que solo atendiendo de manera integral, con una visión de Estado, es como vamos a lograr transformar al sistema penitenciario del país”, concluyó.

Por su parte, el Licenciado José Antonio Parra Medina, Rector del Consejo Mexicano de la Sociedad de Estudios Internacionales, destacó la colaboración de la CNS, del OADPRYS y de los los gobiernos de Francia, Chile, y Panamá, además de diversas empresas que apoyaron para la realización de este Congreso.

Además, destacó que el objetivo de este evento consiste en “fortalecer el debate y la discusión sobre el modelo de gestión penitenciaria que debe consolidar en México”.

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Internacional papa francisco Papa León XIV vaticano

Robert Francis Prevost, un moderado estadounidense con fuertes lazos con Perú

AFP

Por: AFP

hace 6 días

Robert Francis Prevost, un moderado estadounidense con fuertes lazos con Perú

Robert Francis Prevost llegó a Perú por primera vez como joven misionero agustino y años después partió desde el país andino como obispo rumbo al Vaticano, donde este jueves se convirtió en el primer papa estadounidense, con el nombre de León XIV.

Prevost, de 69 años y que también tiene nacionalidad peruana, llega al trono de San Pedro con una reputación de moderado, crucial en un momento en que la Iglesia aparece muy dividida.

Desde el balcón de la basílica de San Pedro del Vaticano, el nuevo papa instó a «construir puentes» a través del «diálogo», avanzando «sin miedo, unidos, dando la mano a Dios y dándonosla entre nosotros».

«Dios nos ama, Dios os ama a todos, y el mal no prevalecerá», afirmó en su primer discurso, en el que trató de unir y tranquilizar ante un mundo asolado por las guerras.

«Mucho por hacer»

Prevost ha pasado un tercio de su vida en Estados Unidos. El resto entre Europa y América Latina, una de las periferias del mundo de donde también era el argentino Jorge Mario Bergoglio.

El diario italiano La Repubblica lo llamó «el menos estadounidense de los estadounidenses» por la moderación de sus palabras.

La idea de un papa norteamericano estuvo por siglos descartada en Roma, ya fuera por la distancia –estaban tan lejos que normalmente llegaban tarde a los cónclaves– o por decisiones geopolíticas.

Según el sitio especializado Crux, tener un pontífice de la primera potencia mundial hacía temer además que la CIA pudiera meter sus manos en la Iglesia.

Arzobispo emérito de Chiclayo, a unos 750 km al norte de Lima, Prevost obtuvo la nacionalidad peruana en 2015.

Dejó Perú para sumarse al gobierno vaticano, donde dirigió el importante dicasterio para los Obispos, que tiene la destacada función de aconsejar al papa sobre los nombramientos de los jerarcas de la Iglesia.

Tras la muerte de Francisco, Prevost dijo que aún quedaba «mucho por hacer» en la transformación de la Iglesia.

«No podemos parar, no podemos retroceder. Tenemos que ver cómo el Espíritu Santo quiere que la Iglesia sea hoy y mañana, porque el mundo de hoy, en el que vive la Iglesia, no es el mismo que el mundo de hace 10 o 20 años», dijo el mes pasado a Vatican News.

«El mensaje siempre es el mismo: proclamar a Jesucristo, proclamar el Evangelio, pero la manera de llegar a las personas de hoy, los jóvenes, los pobres, los políticos, es diferente», añadió.

Misionero en Perú

Fue uno de los cardenales más cercanos a Francisco, cuyo pontificado generó resistencias dentro de los sectores más conservadores.

Pero al mismo tiempo, su sólida formación en Derecho Canónico tranquiliza en estos círculos que buscan un enfoque más centrado en la Teología.

Prevost nació el 14 de septiembre de 1955 en Chicago y asistió a un seminario menor de la Orden de San Agustín en San Luis como novicio antes de graduarse en Matemáticas en Filadelfia.

Políglota, estudió Derecho Canónico en Roma, donde también obtuvo un doctorado.

Se unió a los agustinos en Perú en 1985 para la primera de sus misiones en el país andino.

Al regresar a Chicago en 1999, fue nombrado prior provincial de los agustinos en esa región estadounidense y posteriormente prior general de la orden en todo el mundo.

Regresó a Perú en 2014 cuando Francisco lo designó administrador apostólico de la diócesis de Chiclayo.

Casi una década después, entró en la curia en sustitución del cardenal canadiense Marc Ouellet, que fue acusado de agredir sexualmente a una mujer y renunció por motivos de edad. Entonces, el difunto pontífice lo nombró también presidente de la comisión pontificia para América Latina.

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