CIUDAD DE MÉXICO.- Con un 75% de estrés laboral, México se coloca a la punta de un ranking mundial, superando a naciones como China (73%), Estados Unidos (59%) y Brasil (55%), según un estudio del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en conjunto con la firma Regus.

Debido a esto, anualmente el país tiene mermas que oscilan entre los 5.000 y los 40.000 dólares, gracias a un fenómeno que ha sido definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una «epidemia mundial».

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) calcula que este problema, que se refleja en una fuerte ansiedad o irritabilidad al desempeñar una tarea remunerada, representa pérdidas que van del 0.5 al 3.5% del Producto Interno Bruto (PIB) de los países.

Los expertos tiene identificada una lista de profesiones u oficios más proclives al estrés laboral en las que figuran en primer como los médicos, enfermeras, mozos de restaurante, profesores, contadores, administrativos, vendedores y operarios de las minas. Para visualizar el impacto verdadero que puede tener el excesivo estrés causado por el trabajo, basta con una cifra elocuente: en México se registran aproximadamente 75.000 infartos al año, de los cuales 25% son provocados por las presiones en el empleo.

El estrés laboral engloba una serie de trastornos que van del nerviosismo derivado de la excesiva carga de trabajo o una alta responsabilidad a la fatiga crónica y el acoso laboral.

La firma consultora AON presentó hace dos meses una Encuesta de Salud 2016, realizada entre más de 400 empresas, cuyas conclusiones arrojaron que el 55% de estas firmas ha puesto en marcha estrategias de horarios flexibles y oficina en casa para reducir el estrés laboral.

Según el estudio, el estrés laboral ocasiona complicaciones como cáncer, infartos al miocardio, accidentes laborales, y molestias en columna o rodillas.

Los dolores de cabeza, el asma, la caída de cabello, los problemas en la piel, musculares y de articulaciones son los males más comunes que desencadenan el estrés laboral», señala el estudio.

Los desequilibrios emocionales vinculados a este problema «se manifiestan en mala calidad de sueño, ansiedad, depresión, preocupación excesiva y desconcentración», según el relevamiento. GAPE, una empresa mexicana de «headhunting», que se dedica a la búsqueda de ejecutivos de empresas, señala que el estrés laboral es «uno de los problemas más graves en la actualidad, que no sólo afecta la salud de los trabajadores, sino también sus relaciones, desempeño y productividad laboral».

Luis Gutiérrez, consultor independiente en temas laborales, estima que entre las principales causas del estrés laboral figuran la presión por el exceso de trabajo, los plazos de entrega excesivamente cortos y las tareas muy repetitivas o monótonas.

También estresa el aburrimiento, el miedo a perder el puesto de trabajo, la baja remuneración y el poco reconocimiento a los logros realizados, así como el alto nivel de responsabilidad y el miedo a cometer un error grave, entre ellas un accidente. Gutiérrez también menciona la falta de apoyo por parte de los jefes e inclusive de los subalternos y el acoso laboral.

GAPE formula varias recomendaciones para llevar a cabo un buen manejo del estrés laboral y evitar sus consecuencias, entre ellas la importancia de levantarse temprano para evitar los atascos de tránsito y la elaboración de una lista de las tareas más urgentes de la jornada.

Aconseja también a los empleados y trabajadores «definir prioridades y distinguir entre lo importante y lo secundario para no distraerse de tareas que pueden dejarse para otro momento». Otra de las sugerencias de la empresa consiste en tomarse un descanso de al menos 5 minutos cada dos horas, en algún espacio tranquilo de la oficina para distraerse y favorecer la concentración.

jcrh