El asesinato de Fátima, una niña de siete años, fue uno de los temas que abordó hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) durante su conferencia matutina. El cuerpo de la pequeña fue encontrado en la colonia Los Reyes en la alcaldía de Tláhuac, días después de haber sido reportada como desaparecida.

“Es muy lamentable que esto suceda y desde luego estamos haciendo lo que corresponde para evitarlo. Lo más eficaz es aplicar una política para tener una sociedad mejor, yo sostengo que se cayó en una decadencia, en un proceso de degradación”, respondió Lopez Obrador al ser cuestionado sobre el crimen.

Al mandatario se le preguntó si hacían falta leyes más severas para castigar los delitos como el que cometió contra la menor, a lo que el mandatario dijo: “esto no se resuelve con policías o con políticas de mando dura, que se instaura hasta el cansancio que solo buenos, podemos ser felices. Esto es el fruto prohibido del egoísmo y de la acumulación de bienes en algunas cuantas manos”.

El neoliberalismo y la descomposición social, causa del asesinato de Fátima

«Se cayó en una decadencia, fue un proceso de degradación progresivo que tuvo que ver con el modelo neoliberal.

El mandatario continuó diciendo que aunque existen mediciones en cuanto a desempleo, crecimiento económico, y homicidios, aún no se mide el grado de lo que él llama la «descomposición social que produjo la política neoliberal».

«Hay una crisis profunda de pérdida de valores en el país. No han pasado a más las cosas -aunque están de por sí muy graves- porque México es un país con una gran reserva de valores. Pero fue mucha la descomposición que produjo el individualismo, el egoísmo, el predominio de lo material.

«Esto es el fruto podrido del egoísmo y de la acumulaciuón de bienes en una cuantas mano y del abandono de la inmensa mayoría de nuestro pueblo», «, elaboró el mandatario.

No se resuelve con policías ni con mano dura

AMLO expresó que el asesinato de Fátima y los feminicidios son crímenes que tienen que ver con odio, con problemas sociales y familiares. «Es una enfermedad social», dijo.

«Entonces, esto no sólo se resuelve con policías ni con cárceles, ni con amenazas de mano dura. Aquí tenemos que atender el fondo; que haya bienestar material y bienestar del alma, que se insista hasta el cansancio que solo siendo buenos podemos ser felices», concluyó.

Reiteró que confía en la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y la titular de la Fiscalía General de la República, Ernestina Godoy, para que realicen una investigación y se encuentre a los culpables.

Con información de Notimex