CIUDAD DE MÉXICO.- Las ideas surgen de la chistera cual magos, el asunto de la verificación vehicular, el cierre de algunos verificentros, tanto por las multas como por falta de tecnología, han orillado al grupo parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados a usar este centro de atención pública al afirmar que promoverán además de asesorar a ciudadanos que presenten juicios de amparo contra vicios de inconstitucionalidad.
Aquellos ciudadanos que cuenten con un vehículo que si bien no es nuevo o del año, pero que se halle sobre el rango en cuanto a niveles de emisiones contaminantes y puedan aspirar a la calcomanía 00 o bien quedar exento de la verificación por dos años, serán apoyados. El PAN queriendo aprovechar la situación busca repetir su acción del 2014, cuando exigió ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación permitir que más autos circularan por las calles, “si se encuentran en buen estado”.
A través del diputado capitalino Santiago Torreblanca, el blaquiazul demandó que, en su lugar, el gobierno capitalino debe, primero, poner orden en los verificentros y, después, dar incentivos fiscales, créditos para concesionarios de transporte público y un semáforo de emisiones, entre otras propuestas para la movilidad de la CDMX.
De nuevo, como hace dos años, Acción Nacional criticó la decisión de “limitar la calcomanía 1 a los vehículos de anteriores a 2006. La lógica del GCDMX fue que a partir de ese año, por norma, todos debían tener una computadora de viaje. Eso es un error porque, si bien desde 2006 tenían la obligación, desde antes de ese año, muchas armadoras lo cumplían voluntariamente”, argumentó.
Informó que, a través de sus casas de enlace y gestión ciudadana, los legisladores federales del PAN ayudarán a ampararse “a todo aquel ciudadano que lo desee, a todas las personas que tengan un vehículo de 2006 y anteriores, que cuenten con OBDI u OBDII y se mantengan en los límites de emisiones establecidos en el programa”.
El legislador enumeró sus propuestas para mejorar la movilidad en la Ciudad de México. Entre ellas, “hacer la verificación anual y no semestral para no generar saturación y no cargar tanto al bolsillo de los capitalinos; bajar la carga fiscal a los vehículos no contaminantes como forma de incentivo; implementar un semáforo de emisiones para que a través de calcomanías (verde, amarillo y rojo) la persona sepa cuánto contamina un vehículo y otorgar créditos a los concesionarios de transporte público”.
“Con estos créditos, todos los concesionarios van a poder cambiar a un vehículo no contaminante y no sólo los que tengan el dinero. Así también evitaremos la creación de monopolios”, recalcó.
El diputado federal reafirmó que se deben cambiar los criterios inconstitucionales del nuevo programa de verificación vehicular, al que llamó una “cacería de brujas, recaudatorio y que no sirve de fondo”.
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