* China se comprometió a bajar los niveles de contaminación, buscan reducir el smog al 58 por ciento en el año 2020
* La guerra comercial y las tarifas impuestas por Estados Unidos, aumentan el costo de cambiar a energías más limpias

Beijing, China, se ha convertido en todo un ejemplo a seguir, pues sus residentes respiran el aire más puro que han tenido desde el 2008.

Ese país se ha comprometido 100% a bajar los niveles de contaminación, por ello, buscan reducir los índices de contaminación al 58 por ciento en 2020. Pretenden sustituir el carbón por gas natural y reactores nucleares, así lo explicó el analista de Jefferies Group LLC, Laban Yu, en un comunicado.

Los niveles de contaminación en julio promediaron 44 microgramos de partículas, suspendidas en el aire por metro cúbico; mientras que en 2013, las diminutas partículas alcanzaron un máximo de 35 veces el límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud.

La lucha del Gobierno por respirar aire puro

Los residentes de Beijing sí notan un cambio en la calidad del aire, por lo que millones de empresas y familias del norte se vieron obligadas a cambiar de carbón a gas natural, una combustión más limpia para obtener energía industrial y calefacción doméstica.

El presidente Xi Jinping convirtió la lucha contra la contaminación del aire en una de las principales prioridades del país. Expertos en la materia celebran las políticas ambientales implementadas por el gobierno.

Tim Buckley, director de estudios de finanzas energéticas en el Instituto de Economía Energética y Análisis Financiero de Sydney, dijo: «China ha hecho una promesa muy clara de ‘recuperar los cielos azules’, no pasa una semana sin que no introduzcan una nueva regulación o política para promover este compromiso».

El aumento en el consumo de gas de China, lo ha convertido en el mayor importador mundial de combustible y ayudó a elevar los precios mundiales del gas natural.

Pero todavía, hay un largo camino por recorrer. La guerra comercial y las tarifas impuestas por Estados Unidos, sobre  todo en paneles solares y gas natural aumentan el costo de cambiar la energía del país a combustibles más limpios.

Según Jiang Kejun, investigador de Energy Research Institute de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China; «Nuestra tecnología es mejor que la que existe en Londres, por lo que es probable que China vaya más rápido para frenar la contaminación del aire».

Imagen: AFP

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