* La supuesta madre de «Lalo» y varios de sus amigos llegaron al lugar del atraco

El martes 11 de diciembre un asalto terminó bastante mal para un joven de 20 años de edad.

Según los reportes policíacos, un hombre llamado Eduardo, intentó asaltar al conductor de una camioneta.

Sin embargo, un policía se percató de la situación y se involucró en el suceso para evitar el robo.

Como resultado el presunto delincuente perdió la vida.

Los hechos tuvieron lugar cerca de las 14:30 horas en Avenida Central entre Calle 4 y Ferrocarril de Cuernavaca, en la alcaldía Álvaro Obregón.

Viral

Luego de que se frustró el asalto, algunos testigos decidieron grabar la situación.

Mientras tanto y ante la sorpresa de varios, los familiares del supuesto delincuente abatido llegaron al lugar.

Al reconocerlo, algunos se hincaron al lado del cuerpo y comenzaron a llorar su pérdida.

Incluso, una mujer, que se presume es madre de «Lalo», tomó el cadáver y lo abrazó entre sus brazos envuelta en llanto.

Mientras tanto, los policías dejaron que las víctimas del atraco dejaran la escena del crimen en un aparente afán de protegerlos de alguna represalia.

El video se hizo viral en redes sociales donde desató miles de comentarios en son de agrado por el fallecimiento de un presunto delincuente.

Según los reportes, Eduardo recibió un balazo en el estómago, pero al parecer lo que le arrebató la vida fue certero tiro en la cabeza.

Además, trascendió que los oficiales llamaron a los servicios de emergencia, pero ya no pudieron hacer nada por salvar la vida del joven.

Viejo «conocido»

Según información de la Policía capitalina, Eduardo era un criminal que solía operar en aquella colonia.

Presuntamente, y con ayuda de una pistola, «Lalo» asaltaba negocios, transeúntes y automovilistas.

Además, los policías lo tenían ubicado, pero no habían logrado capturarlo con «las manos en la masa» hasta este último asalto.

Adiós…

Familiares y amigos se despidieron de «Lalo» como si fuera un héroe.

Al estilo del narcotráfico, tiraron balazos al aire y limpiaron su sangre del asfalto con Coca-Cola.

Gritos como «eres mi chingón» se escucharon en aquella calle de Álvaro Obregón.

Imagen: @alertasurbanas

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