El empresario Carlos Slim y la actriz Angélica Rivera fueron captados en el desfile de moda de la firma Dolce & Gabbana, el cual se presenta por vez primera en nuestro país.

El evento se llevó a cabo en el Museo Soumaya, propiedad de Slim Helú, en donde la legendaria Sophia Loren fue la invitada de honor y por supuesto, fue adulada por un ejército de celebridades y fashionistas.

En la presentación, entendida como una activación de marca, no tendría nada de extraordinario, salvo la presencia de funcionarios de alto calibre como Angélica Rivera, Primera Dama de México, quien se encontraba acompañada de Carlos Slim.

Fue la noche del martes cuando la banalidad ratificó su poder al desplegar un fuerte dispositivo de seguridad para proteger a Sophia Loren, quien llegó escoltada no sólo por los propios diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana, sino por el propio Slim, quien más tarde compartía asiento preferencial en medio de la diva italiana y la Primera Dama de México, en una imagen que despertó críticas inmediatas a Angélica Rivera.

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“Codeándose con Carlos Slim y Sophia Loren. Porque no hay niños con hambre e Oaxaca y Chiapas, ¿verdad?”, decía un usuario en Twitter.

“La Primera Dama sin más que hacer”, decía un comentario en una foto que mostraba a los tres personajes a su llegada.

En un país en el que el grueso de la población no se encuentra en posibilidades de satisfacer sus necedades básicas, la presencia de la esposa del Presidente dicho evento se antoja como la oprobiosa representación del clasicismo al servicio de la Alta Moda.

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