*Mucho se ha escuchado sobre la terapia para “curar” la homosexualidad, como si esto fuera una enfermedad, algo así como una gripe.

Mucho se ha escuchado sobre la terapia para “curar” la homosexualidad, como si esto fuera una enfermedad, algo así como una gripe.

Aún en nuestros tiempos la homosexualidad ha llegado a “tratarse” con electrochoches, en donde los pacientes son sometidos.

Esto para para provocar en los pacientes cierta repulsión hacia imágenes, en este caso, un hombre o una mujer, según sea el caso.

Esta terapia de aversión, sueñe utilizarse para “síntomas”  como el alcoholismo o la drogadicción, generalmente se llega a medicar a los «pacientes» con fármacos y con terapias.

A pesar de que en varios lugares de Estados Unidos y otros países europeos están prohibidas, e incluso distintas asociaciones de psicología las rechazan, varios ‘terapeutas’ han hecho negocio con ello.

Tal es el caso de David Matheson, quien promovía sus ‘consultas’ diciendo que la homosexualidad ‘podría ser curable’.

La creencia

Matheson hizo fama y negocio por su ‘trabajo de conversión “gay”, y por si fuera poco, publicó libros y lanzó varios programas experimentales.

Pero, resulta que después de unos años ha decidido revelar que es homosexual.

Y lo hizo a través de su cuenta oficial de redes sociales.

“Hace un año me di cuenta de que tenía que hacer cambios sustanciales en mi vida. Me di cuenta de que no podía quedarme en mi matrimonio más tiempo», Matheson.

Después de 34 años de estar casado, Matheson decidió separarse porque según él “estar en una relación íntima con un hombre ya no era algo que quería evitar”.  Se había convertido en una “necesidad».

A pesar de vivir esta situación Matherson asegura que no se arrepiente de su labor en la ‘reconversión gay’.

El terapeuta afirma que ayudó a muchas personas, y de igual manera animó a más gente a “ser realmente dueños y sentirse seguros de su camino de vida».

Imagen: Especial 

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