• Gracias a las acciones que ha instrumentado el gobierno federal y con el apoyo de los demás sectores productivos, el trabajo infantil ha disminuido, destacó Roberto Campa Cifrián
• En el sexenio de 3.5 millones a 2.1 millones, es decir, 1.4 millones de niños que han dejado de trabajar

INFORMACIÓN: Notimex    IMAGEN: Flickr

El funcionario señaló que es necesario que las autoridades federales, empresarios, sindicatos y organizaciones civiles redoblen esfuerzos para que los niños y adolescentes no dejen las escuelas por dedicarse a trabajar.

Al encabezar la ceremonia de la Entrega del Distintivo “México Sin Trabajo Infantil”, que se llevó a cabo en el Museo del Niño, enfatizó que uno de los avances más importantes de la actual administración fue en materia de generación de empleos, ya que se espera llegar a los cuatro millones en el segundo cuatrimestre.

Dio a conocer que de 2012 a la fecha se han generado 3.6 millones de empleos formales, mientras que en las dos administraciones anteriores juntas apenas se crearon 3.5 millones.

La mejor política social es la generación de fuentes de trabajo para los mexicanos, ya que de esta manera se reduce la pobreza y la posibilidad de que los menores de edad trabajen, estableció Campa Cifrián.

Los indicadores que se tienen al respecto, dijo, van a la baja, pero aún hay mucho por hacer para alcanzar la meta de que en 2025 ningún niño tenga la necesidad de trabajar.

El mayor reto que tenemos, admitió, se encuentra en el campo, en donde, afortunadamente, las empresas agrícolas han tomado conciencia de que no deben contratar a menores de edad, por lo que ahora exigen que no haya niños trabajando la tierra.

El encargado de la política laboral del país, expuso que México ha ratificado el Convenio 130 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y ha realizado reformas constitucionales, así como a las leyes secundarias para elevar la edad de adolescentes que puedan trabajar.

Por su parte Hulmut Schwarzer, especialista principal en protección social y desarrollo de la OIT, reconoció que en la región latinoamericana ha habido una reducción importante en el trabajo infantil, ya que de 20.7 millones que se tenía anteriormente ahora llega a 10.5 millones.

“Es una reducción de casi la mitad en el continente, pero es necesario seguir avanzando en los programas para que este fenómeno no se eleve y alcanzar el objetivo de 2025 de haber erradicado el trabajo infantil en la región», concluyó.

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