Berkshire Hathaway, el holding del multimillonario estadounidense Warren Buffett, recibió un cuantioso cheque de 29,000 millones de dólares del gobierno, gracias a la nueva reforma fiscal adoptada por la administración Donald Trump que redujo fuertemente los impuestos de las empresas.
En su esperada carta a los accionistas, Buffett explicó que las ganancias netas de las participaciones de su sociedad habían sido de 65,300 millones de dólares en 2017.
«Gran parte de esas ganancias no vienen de lo que hemos logrado en Berkshire,» explicó Buffet, uno de los inversores más admirados del mundo. «Solo 36,000 millones proceden de nuestras operaciones, los otros 29,000 nos los entregaron en diciembre cuando el Congreso reescribió el código fiscal».
La reforma redujo la tasa de imposición de las empresas estadounidenses del 35 al 21%, lo que hizo que muchas de ellas modificaran su contabilidad, cambios que para algunas se tradujeron en costos adicionales y para otras, como Berkshire Hathaway, en enormes ganancias fiscales.
Berkshire Hathaway posee participaciones en más de una docena de grandes corporaciones de varios sectores de la economía estadounidense como American Express, Apple, Bank of America, Charter Communications, Coca-Cola, Delta Air Lines, General Motors, Goldman Sachs, Moody’s, Wells Fargo y Southwest Airlines.
Su beneficio neto pasó de 24,070 millones de dólares en 2016 a 44,940 millones el 31 de diciembre de 2017.
Con información de AFP.