* «Me gustaría que esta noche ustedes me juzguen», dice el profesional
* Marcos Hourmann se presenta en escena: «soy el primer médico condenado en España por practicar la eutanasia
El argentino Marcos Hourmann se presenta en escena: «soy el primer médico condenado en España por practicar la eutanasia».
Lo dice ante el público de un teatro madrileño, al que lanza un insólito desafío: «Me gustaría que esta noche ustedes me juzguen».
A pocas semanas de las elecciones legislativas del 28 de abril en España, la pieza documental «Celebraré mi muerte» relanza el debate de forma inédita.
Y todo ello cuando el presidente saliente Pedro Sánchez promete «reconocer el derecho a la eutanasia», una práctica legal en Holanda, Bélgica y Luxemburgo, si logra una mayoría suficiente para seguir en el gobierno.
En el Teatro del Barrio, el doctor Hourmann vacía cada noche su historia, 14 años después de haber acortado el sufrimiento de una paciente terminal.
«Este regalo que me dan es disfrutar de la posibilidad de vomitar» las palabras nunca dichas, «una gran catarsis personal» en definitiva, cuenta este médico que fue condenado sin proceso ni debate público.
«Quince días antes del juicio, la fiscalía pide un acuerdo y lo aceptamos: de 10 años de cárcel por homicidio, me lo rebajan a uno por homicidio imprudente, y como no tenía antecedentes penales, no entro en la prisión», explica este argentino de 59 años.
Hourmann se propuso rehacer su carrera de médico en Reino Unido, pero en el año 2010, se encontró con que el tabloide The Sun hacía campaña en su contra, calificándolo de «killer doc».
«Ayudar a morir»
El 28 de marzo de 2005, Hourmann estaba de guardia en las urgencias del hospital de Tarragona, en Cataluña, cuando le llegó una paciente aquejada de un cáncer de colon en fase terminal y otras patologías.
En dos ocasiones, recuerda que le dijo: «quiero morir».
«La mujer a la que yo maté se llamaba Carmen. Tenía 82 años. Le administré cloruro potásico en vena», dice el doctor.
¿Por qué consignar sus actos por escrito y exponerse así a acusaciones?, pregunta una voz en off durante la pieza teatral.
«Si no lo escribía, era como ir en contra de lo que pienso», responde el médico, contra toda «hipocresía».
Imagen: AFP