hace 8 años
Con el fin de solucionar esto, nos encontramos con Dexmo, un exoesqueleto que se coloca sobre las manos y que permite incorporar el sentido del tacto en juegos y otros entornos virtuales. Este particular aparato, es obra de Dexta Robotics, una empresa estadounidense especializada en robótica.
hace 8 años
Para llevar a cabo este sensacional avance, pequeños procesadores informáticos implantados en el cerebro de Nathan Copeland se saltan la médula espinal que tiene dañada y transmiten las señales eléctricas que gobiernan el movimiento y la sensación hacia y desde el brazo robótico.