hace 8 años
No recuerdo a ningún presidente que, en tan poco tiempo, haya dañado tanto la reputación de Estados Unidos. La mayoría de los estadounidenses lo rechazó en las urnas y, hoy por hoy, representa una amenaza para su estabilidad democrática.
hace 8 años
Diseñemos una estrategia nacional de respuesta, organicemos un reencuentro nacional. Ayudar, pensar, proponer y apoyar al gobierno federal son obligaciones patrióticas. A nadie le conviene sepultarlo en críticas y burlas cuando se requiere solidaridad y argumentos. ¿Y si dejamos de comprar productos estadounidenses? Consumamos lo mexicano. ¿Se podrá? Es un buen comienzo…