* La «Viuda Negra» quedó en libertad luego de que la Procuraduría calificara su detención como «ilegal»

Berenice Alanís trabajaba como empleada doméstica del empresario Jacobo Quezada.

Pasó el tiempo y la chica se ganó el corazón de su patrón.

Finalmente se casaron y así se convirtió en la madrastra de los jóvenes hijos de Quezada.

Sin embargo, tiempo después comenzaron los problemas para la pareja.

Y es que, según ContraRéplica, Alanís tuvo un amorío con su hijastro.

Por ello, el empresario sacó de su testamento a la mujer.

Con ese movimiento, a ella no le tocaría nada de la fortuna que se presume tenía el empresario.

El crimen

Un buen día, el empresario y sus dos hijos se encontraban al interior de un gimnasio propiedad de la familia.

A aquel lugar entraron hombres armados, quienes balearon a los tres.

Los jóvenes perdieron la vida en el baño del local.

El padre falleció mientras era trasladado al hospital.

Según Vanguardia, Alanís fue detenida por la Policía de Investigación poco después del crimen, del cual era la principal sospechosa como autora intelectual.

Sin embargo, la Procuraduría capitalina calificó la detención como «ilegal» por lo que la mujer quedó libre.

Y sigue

Según informó Carlos Jiménez, en ContraRéplica, Alanís, ahora conocida como «Viuda Negra», salió del penal de Santa Martha Acatitla.

Después, acudió al domicilio de su esposo fallecido con 17 plataformas móviles.

Y finalmente se llevó la colección de autos de lujo del empresario, con un valor estimado de 20 millones de pesos.

La «Viuda Negra» logró llevarse, cuando menos, dos Corvette, tres Mini Cooper, dos autos Mustang, un Grand Marquis y dos motocicletas.

Ahora se desconoce su paradero.

Imagen: Especial