Imagen: Especial
- Un cazador de tesoros y experto en arte halló el anillo de oro de Oscar Wilde, una joya que el famoso escritor le regaló a uno de sus amigos
Un anillo de oro, que el famoso escritor irlandés Oscar Wilde regaló antaño a un amigo, fue hallado por un experto de arte holandés casi 20 años después de haber sido sustraído en la universidad británica de Oxford.
La sortija de 18 quilates, que el escritor regaló a un compañero de estudios en 1876, era un elemento central de la colección del Magdalen College, uno de los colegios universitarios más prestigiosos de Oxford, en Inglaterra, donde estudió Oscar Wilde.
La joya fue sustraída durante un robo en 2002, tras el cual su paradero era un misterio. Se temía que la sortija, valorada entonces en más de 40.000 euros, hubiera sido fundida.
Finalmente, el anillo, cuya forma recuerda a la hebilla de un cinturón, reapareció gracias a las indagaciones del experto de arte holandés, Arthur Brand.
Conocido como el «Indiana Jones del mundo del arte» por sus logros como investigador, Brand activó sus contactos en el mundo del hampa para hallar el rastro del tesoro.
El Magdalen College se declaró «agradecido» y «muy feliz de haber recuperado un objeto robado que forma parte de una colección de uno de los antiguos estudiantes más famosos», indicó a la AFP Mark Blandford-Baker, tesorero.
«Habíamos perdido la esperanza de volver a verlo», reconoció.
El anillo será devuelto «durante una ceremonia» el 4 de diciembre en el colegio, donde volverá a ocupar su importante lugar en la colección de recuerdos de Oscar Wilde, escritor, novelista, dramaturgo y poeta, conocido especialmente por su novela «El retrato de Dorian Gray» (1890).
«Regalo de amor»
La joya fue un regalo del escritor – cuyo nombre completo es Oscar Fingal O’Flahertie Wills Wilde – y de un camarada de clase, Reginald Harding, a su amigo William Ward, de sus años de estudios en Oxford.
«Regalo de amor, para el que desea el amor» es la inscripción en griego que figura en el anillo. En el interior están gravadas las iniciales: «OF OF WW + RRH to WWW».
Probablemente, estas inscripciones no significaron gran cosa para Eamonn Andrews, ex empleado de la limpieza del Magdalen, que en 2002 allanó el establecimiento, se bebió el whisky del bar del colegio y robó el anillo, así como dos medallas de otra colección.
El Magdalen College ofreció rápidamente una recompensa de 3.500 libras (más de 4.000 euros) a aquel que devolviera el bien. Pero tras ser detenido, el ladrón declaró ante un tribunal que lo había vendido a un chatarrero por solo 175 euros.
La historia podría haber terminado ahí, si no fuera por el olfato de Arthur Brand, que saltó a la fama mundial en 2015 cuando encontró dos caballos de bronce de Josef Thorak, uno de los escultores preferidos de Hitler.
En marzo, el experto holandés halló un cuadro de Picasso que había sido robado hace 20 años en un yate en Francia.
«Mundo criminal londinense»
«En 2015 estallaron rumores en el mundo del arte, según los cuales una sortija victoriana ‘grabada con letras en ruso’ había reaparecido», contó Brand a un corresponsal de la AFP, que pudo ver la joya en un apartamento en Ámsterdam.
«Sabía que habían robado el anillo de Oscar Wilde […] y que llevaba una inscripción en griego. Solo podía tratarse del mismo anillo», dijo.
Brand se pone entonces manos a la obra, junto a un anticuario afincado en Londres, William Veres. Su búsqueda les lleva hasta George Crump, explicó, «un hombre honesto que conoce el mundo criminal londinense gracias su difunto tío, expropietario de un casino».
Las conexiones de Crump permitieron a Arthur Brand encajar las últimas piezas del puzzle, antes de encontrar finalmente el anillo, tras una epopeya digna de una novela policíaca.