Imagen: AFP
- La carrera para crear embrioides, masas celulares que imitan embriones sin necesidad de fecundación, ha generado controversia ética y legal.
- Los embrioides ayudan a comprender los primeros días de un embrión humano y se han logrado avances en su creación con material humano, aunque aún falta validación independiente.
- Los estudios con embrioides se encuentran en una etapa crucial, ya que a partir de los 14 días los embriones humanos comienzan a formar órganos, pero su estatus legal y las preocupaciones éticas deben ser abordados cuidadosamente.
La carrera para crear embrioides, grupos de células que se asemejan a embriones, ya empezó. Por eso, varios laboratorios anuncian avances decisivos en ese campo, lo que provocó una fuerte polémica.
Los embrioides son masas celulares que imitan el funcionamiento y el desarrollo de un embrión. En otras palabras, es la primera etapa del desarrollo de un organismo multicelular.
La diferencia está en que en el caso de los embrioides, no se necesita fecundación.
Los primeros embrioides fueron de ratones
Varios equipos de investigadores han anunciado en los últimos días estudios provisionales (sin haber sido verificados por otros científicos independientes) con material humano, lo que suscita muchas cuestiones éticas y legales, como ya sucedió con la clonación hace décadas.
Aunque a veces son calificados como «embriones de síntesis», los embrioides son en realidad incapaces de desarrollarse en un feto de manera viable.
Pero estos amasijos celulares tampoco son totalmente sintéticos, puesto que son generados a partir de células reales.
Para los científicos, la utilidad de los embrioides radica en que ayudan a comprender los primeros días de un embrión humano, un periodo aún desconocido.
Hasta ahora los expertos utilizaban células de animales, básicamente ratones, para experimentar.
Pero ahora la rivalidad se ha trasladado al corazón de la vida humana.
Dos equipos se destacan, el de la investigadora Magdalena Zernicka-Goetz, en el Reino Unido, y el del israelí Jacob Hanna.
Ambos ya publicaron el año pasado, con pocas semanas de intervalo, artículos científicos que detallaban cómo consiguieron crear los primeros embrioides de ratones.
Ahora el equipo de Zernicka-Goetz acaba de anunciar, en una conferencia en Boston la semana pasada, que ha logrado crear las primeras estructuras celulares a partir de material humano.
Su rival, Hanna, dice que esos amasijos de células no están suficientemente desarrollados y diferenciados para ser comparados a embrioides reales.
«La profesora Zernicka-Goetz es a veces una gran científica y le debemos muchos avances, pero este caso preciso no es serio, en términos científicos», declaró Hanna a la AFP.
Después de esta declaración, el equipo dirigido por el científico israelí publicó sus propias investigaciones. Según estas, sus ensayos sí son lo suficientemente avanzados para ser considerados embrioides humanos auténticos.
Ausencia de validación independiente
La carrera se ha extendido a otros equipos investigadores, en China y Estados Unidos.
Pero todos estos estudios no los han revisado científicos independientes, el proceso conocido en inglés como «peer to peer» (entre iguales). Esto es indispensable para su validación académica.
Algunos observadores atribuyen la primacía del descubrimiento a Hanna, ya que su equipo, siempre según los datos provisionales publicados, no tuvo que modificar genéticamente las células humanas que utilizó, contrariamente al equipo de Zernicka-Goetz.
Algunos embrioides del equipo de Hanna parecen haber alcanzado un estadio evolutivo cercano a un organismo de 14 días y «guardan un parecido sorprendente con un embrión natural», aseguró el investigador Jesse Veenvliet, especialista basado en Alemania, en un comentario publicado por Science Media Center, en Gran Bretaña.
Otro experto, Darius Widera, especialista en células madre de la universidad de Reading (Gran Bretaña), insiste en que hay que esperar el proceso de evaluación «entre iguales».
De todas maneras, «el impacto de ambos estudios es inmenso», reconoció en declaraciones a AFP.
Dilema de embriones
El periodo de desarrollo de 14 días es importante, porque según los biólogos, a partir de esa fecha los embriones humanos empiezan a formar órganos, incluido el cerebro.
Es un periodo del que apenas se sabe gran cosa.
El hecho de que los investigadores estén trabajando con material orgánico, vivo, genera todo tipo de incertidumbres sobre cuál es el estatuto legal de estos ensayos.
«Hay que avanzar cuidadosamente, y de forma transparente», explicó James Briscoe, del instituto británico Francis Crick.
«EL peligro es que un error o un anuncio inválido atemorice al gran público y a los responsables políticos», añadió.