Imagen: @jclifewithnolimits
- Carpenter pasó nueve semanas en coma
- Cuando recobró el conocimiento, ya había perdido cuatro dedos de su mano derecha, su brazo izquierdo y ambas piernas
A una enfermera le amputan ambas piernas y un brazo, luego de que fuera al hospital por una tos.
Jayne Carpenter, de 51 años y originaria Merthyr Tydfil en Gales del Sur pasó nueve semanas en el hospital luchando por su vida.
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Durante ese tiempo, su esposo Robert, de 55 años, recibió la terrible noticia; Jayne moriría si no se le realizaba la triple amputación.
Con el tiempo, ella despertó del coma. Cuando recobró el conocimiento, ya había perdido cuatro dedos de su mano derecha, su brazo izquierdo y ambas piernas.
Los problemas para Carpenter comenzaron cuando tuvo un pequeño malestar. En un principio, ella creía que era un simple tos.
“Tosía una flema de color oscuro. De repente me puse peor y pensé que era un virus”
Al siguiente día, cuando se despertó le faltaba el aliento y no podía caminar.
“No quise armar un alboroto, pensé que era algo trivial”
Fue a urgencias por una tos; le amputan piernas y un brazo
Jayne le describió sus síntomas al doctor, quien le recomendó ir a urgencias sin sospechar que estaba en las etapas iniciales de una sepsis mortal.
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Primero le dijeron que era neumonía, pero su estado comenzó a deteriorarse rápidamente.
Carpenter pasó nueve semanas en coma. Los doctores se vieron obligados a realizar la triple amputación para salvarle la vida.
A tres años de su odisea, Carpenter ha aprendido a vivir con sus limitaciones. Cambió de trabajo y ahora busca donativos para conseguir sus nuevas prótesis.
«Nadie se imagina entrar entrar en coma por una tos y despertar con la noticia que te amputan las piernas y un brazo»
