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- Botham Jean fue asesinado por a tiros por una policía, en EUA.
- El hermano de la víctima decidió otorgar el perdón a la mujer que le disparó.
Botham Jean fue asesinado a tiros por una policía, en EUA; el hermano de la víctima decidió otorgar el perdón a la mujer que le disparó.
Botham fue asesinado en 2018 por Amber Guyger, una oficial de policía de Dallas, Texas.
Por los hechos, la corte sentenció a Amber a pasar 10 años en prisión.
PERDÓN A LA POLICÍA
Durante la audiencia estuvo presente el hermano de la víctima, Brandr Jean, quien aseguró otorgaba el perdón a la ahora expolicía.
Incluso, dijo, que no quería que ella fuera a la cárcel.
«Todos y cada uno de nosotros hemos hecho algo que se supone que no debemos hacer, quiero lo mejor para ti, porque sé que eso es exactamente lo que Botham querría”, aseguró Brandt Jean.
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Seguido de su discurso, se dirigió a la Jueza y preguntó si podía darle un abrazo a Amber.
La jueza, Tammy Kemp accedió a la petición de Brandt, se bajó del estrado, caminó hacía la expolicía, y ella, desde su banquillo de acusada, corrió para abrazarlo.
El emotivo momento duró poco más de un minuto, mientras Amber lloraba en el hombro del hermano del joven que asesinó.
¿Y por qué no? La jueza se sumó al abrazó a la expolicía y hasta un Biblia le regaló.
La condena fijada para Amber Guyger fue de 10 años de prisión, luego de que un jurado la encontrara culpable del cargo de asesinato contra su vecino.
LOS HECHOS
El 6 de septiembre de 2018, Amber Guyger de 31 años de edad disparó contra Botham Jean, un hombre afroamericano de 26 años de edad.
¿La razón? La mujer, oficial de policía, se confundió de domicilio y pensó que el sujeto al interior de «su casa» era un intruso.
Amber confesó que llegó a casa, tras un turno de 15 horas y confundió su casa con la de su vecino, y al ver el cerrojo abierto, en medio de su confusión, disparó contra el supuesto intruso.
Botham Jean, era un contador, originario de la isla caribeña Santa Lucía, a pesar de recibir atención médica falleció en el hospital.
Amber fue separada de su cargo como oficial de policía y pagó una multa de 300 mil dólares para llevar su juicio en libertad.
La fiscalía alegó que la mujer estaba distraída y cansada por su turno extenuante, además que previó había tenido una conversación sexual con el hombre con el que salía.
A pesar de ello, la condena se estableció en 10 años de prisión.
