CIUDAD DE MÉXICO.- Cifras de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, indican que anualmente en el país, se registran más de 100 mil accidentes automovilísticos, porque el conductor se quedó dormido.
Para evitar esto, el Departamento de Ingeniería en Sistemas Biomédicos de la Facultad de Ingeniería de la UNAM trabaja en el denominado “sistema polisonográfico” para detectar el estado de vigilia y alerta.
Este mecanismo, identifica cuando un individuo empieza a ingresar al estado de somnolencia.
Según la UNAM, en México no existe un dispositivo igual, pero en Australia se desarrolla un sistema que funciona a través de unos lentes, donde se detecta la señal cefálica; sin embargo, las gafas pueden resultar incómodas.
Entre las ventajas de este dispositivo, figura su facilidad de adaptarse a cualquier automóvil, ser portátil, almacenar un histórico de lecturas, contar con mediciones instantáneas, además de que no es invasivo y detecta tres señales biológicas (tono muscular, frecuencia cardiaca y temperatura periférica).
De acuerdo con la UNAM, generalmente luego de que las personas viven un proceso de estrés, le sigue un de relajamiento acompañado de sueño. Este fenómeno, se presenta en los conductores, quienes debido al tráfico de las ciudades, se someten a lapsos de gran tensión, para posteriormente relajarse por lo que corren el peligro de quedarse dormidos, especialmente en carreteras.
Hoy en día como señala la UNAM, el “sistema polisonográfico” se encuentra en su primera etapa de desarrollo. Como hemos señalado, este aparato detecta las señales a través de un parche alámbrico colocado en la espalda o en la muñeca, pero la idea es que a futuro se opere a través de una pulsera en la muñeca, para que sea cómodo, flexible y fácil de usar.
Por el momento, la alerta aparece con un foco que prende cuando identifica los cambios biológicos. De acuerdo con la UNAM, esto previene a la persona hasta siete segundos antes de que se quede completamente dormida.
Además, este método es más seguro, porque si el chofer toma una siesta y se despierta bruscamente, sus latidos pueden pasar de 30 a 120, lo que le causaría un paro cardíaco.
jcrh